En los tiempos que corren, el poder hacer una videoconferencia desde casa se ha convertido en algo ya no solo habitual, sino muchas veces necesario. No son pocos los trabajadores e incluso alumnos que han tenido que hacerse con una webcam para poder atender sus necesidades laborales y educativas, y por este motivo si tienes una Raspberry Pi cogiendo polvo en un cajón vamos a enseñarte cómo puedes convertirla en un puesto de videoconferencia de manera sencilla, rápida e invirtiendo poco dinero.
La idea de este proyecto es dedicar una Raspberry Pi y ciertos accesorios exclusivamente para montar una especie de estación de videoconferencia, de manera que no tengas que utilizar tu PC u otros dispositivos para ello. Con herramientas como Google Meet o Zoom y por supuesto con la ayuda de una Raspberry Pi y una webcam podrás mantenerte en contacto con personas en cualquier parte del mundo, ya sea para trabajo o por estudios.
¿Qué necesitas para hacer una videoconferencia en la Raspberry Pi?
A continuación vamos a listar los materiales que necesitarás, aunque ten en cuenta que estas son nuestras recomendaciones y por supuesto podrás cambiar unas u otras cosas dependiendo de tus necesidades y presupuesto:
- Una Raspberry Pi, preferiblemente una Pi 4 con 8 GB ya que su SoC es bastante más potente que los modelos anteriores, y necesitarás esta potencia para la codificación de vídeo de las videoconferencias. Sin embargo, la mayoría de modelos funcionarán bastante decentemente.
- Un monitor externo con altavoces (una TV antigua pero que tenga HDMI sería ideal).
- Teclado y ratón USB.
- Una webcam USB. También puedes utilizar la Raspberry Pi Camera si la tienes. Sin embargo, dada la naturaleza plug & play de los dispositivos USB, la mayoría de webcams funcionarán sin problemas.
- Micrófono. Si tu monitor no tiene altavoces puedes utilizar unos auriculares con micrófono pero que sean USB en su lugar.
Configurar la Raspberry Pi como estación de videoconferencia
Para comenzar, necesitas instalar Raspberry Pi OS en tu dispositivo. Puedes utilizar otros sistemas operativos, pero Chromium (incorporado en Rasberry Pi OS) utiliza aceleración por hardware, algo que hará que el rendimiento a la hora de realizar una videoconferencia se vea gratamente incrementado.
El siguiente paso es conectarlo todo: el monitor por HDMI y los periféricos por USB. Obviamente también debes conectar tu dispositivo a la red, ya sea mediante un cable RJ-45 de LAN o con un adaptador WiFi, pero el hecho es que sin Internet no podrás realizar videoconferencias como es lógico.
Zoom
Zoom es una de las herramientas para videoconferencias más populares y probablemente sea una de las que quieras utilizar para ello. A pesar de que Zoom tiene aplicación nativa para sistemas operativos Linux, por ahora no es compatible con la arquitectura ARM del procesador de la Raspberry Pi, pero por suerte podrás utilizar su interfaz web sin ningún tipo de problemas.
A la hora de entrar en una videoconferencia creada en Zoon, simplemente debes tener en cuenta que cuando hagas clic en el enlace te saldrá un mensaje para abrir «xdg-open«, y tendrás que pulsar en cancelar.
Cuando lo hayas hecho, pulsa sobre la opción «Abrir en el navegador» y listo, ya habrás accedido a la conferencia por Zoom a través de tu navegador en la Raspberry Pi.
Google Meet
Google Meet funciona directamente desde el navegador, así que no tendrás que instalar ninguna aplicación ni hacer ninguna triquiñuela como en Zoom para que funcione. Simplemente abre Chromium, accede al enlace de la videoconferencia a través de Google Meet, mete los credenciales de tu cuenta y listo, ya podrás acceder a la reunión.
Skype, Jitsi y otras herramientas
Por supuesto, aunque Google Meet y Zoom son las aplicaciones más utilizadas no son las únicas, y no podemos desmerecer otras como Skype por ejemplo. Para Skype, tampoco hay aplicación nativa así que puedes entrar a través de la web igual que con Meet (simplemente entra en https://web.skype.com para acceder a su interfaz web).
Para Jitsi ocurre más o menos lo mismo. Pincha en el enlace de la videoconferencia que te habrán enviado y accederás directamente a su interfaz web sin contratiempos.