Todos conocemos a Gigabyte por ser uno de los principales fabricantes de placas base y tarjetas gráficas del mundo, aunque no muchos conocen su faceta de fabricante de periféricos, un sector donde poco a poco se está haciendo hueco gracias al lanzamiento de productos de gran calidad, sobre todo los que son orientados al mundo Gamer. Es el caso del teclado Gigabyte Aivia Osmium, del cual os presentamos hoy su análisis.
Hay varios modelos de este teclado disponibles, y aunque el más popular es el modelo con mecanismos Cherry MX Red y retroiluminación en color azul, el modelo concreto que os vamos a presentar es el que lleva mecanismos Cherry MX Brown y retroiluminación en color blanco. Este modelo no está todavía disponible en España, pero se espera que lo esté pronto. Hay una creencia popular de que los Cherry MX Red son los mejores mecanismos para Gaming, así que en este análisis vamos a centrarnos bastante en comparar éstos con los Cherry MX Brown que equipa este Gigabyte Aivia Osmium.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Sacadas de la página web de Gigabyte.
Aunque en las especificaciones dice que lleva mecanismos Cherry MX Red ya os hemos explicado que el modelo que vamos a analizar lleva Cherry MX Brown. Por otro lado, este teclado necesita conectarse a un puerto USB 2.0 para funcionar, pero también se puede conectar, adicionalmente (es decir, a los dos), a un puerto USB 3.0 ya que lleva integrado un HUB USB 3.0 que permite la conexión de dispositivos de este estándar y que nos entrega una velocidad muy superior a la del USB 2.0. Por otro lado, también cuenta con salida para auriculares y entrada de micrófono.
Ya solo viendo su peso de 1.5 Kg podemos adivinar que tenemos entre manos un teclado muy pesado y robusto, y es que como veremos en la siguiente sección del análisis, Gigabyte no ha escatimado en cuanto a la calidad de los materiales empleados en este teclado.
ANÁLISIS EXTERNO.
El Gigabyte Aivia Osmium viene embalado en una caja de grandes dimensiones y bastante pesada. En ésta predomina el color negro, y en su cara principal podemos encontrar una imagen a tres cuartos del teclado, con el nombre del mismo predominando la zona inferior con material reflectante. También en esta zona encontramos lo que os hemos comentado antes, la información acerca de los mecanismos Cherry MX Brown y la iluminación en color blanco.
En la parte trasera encontramos un cúmulo de información acerca de todas las bondades que brinda este teclado, pero en esta ocasión y al contrario de lo que suele ocurrir con las placas base de este fabricante, la información viene bien estructurada y es perfectamente entendible por cualquiera.
En uno de los laterales tenemos las especificaciones técnicas concretas de este teclado, que como vemos difieren ligeramente de las que hemos mostrado al principio.
En el otro lateral encontramos la etiqueta identificativa.
Abrimos la caja y encontramos a primera vista el flamante Gigabyte Aivia Osmium perfectamente protegido desde todos los ángulos para evitar daños durante el transporte del paquete.
Junto con el teclado se incluye un accesorio para facilitar la extracción de teclas, así como 4 teclas con diversos logos para sustituir las que vienen por defecto para Macros.
Aquí podemos ver el teclado más de cerca. Como vemos, en esta ocasión nos han enviado un teclado con distribución en inglés, dado que como os hemos comentado antes todavía no está en español con estos mecanismos MX Brown.
Estas son las teclas para Macros. Como veis hemos quitado una de ellas para poder apreciar el mecanismo Cherry MX Brown y de paso el LED que incorpora de manera individual cada tecla.
Una peculiaridad de este teclado es que cuenta con dos ruedas muy parecidas a las de los ratones para cambiar la intensidad de la luz y del sonido. Gigabyte ha pensado en todo, y presionando estas mismas ruedas, al igual que en los ratones, podemos apagar la iluminación o silenciar el ordenador.
En la zona derecha, justo encima del pad numérico, tenemos los LED de estado (bloqueo numérico, de mayúsculas y de desplazamiento), así como el logo de Aivia. Este logo se iluminará en un color que dependerá del perfil que tengamos habilitado en cada momento, y de hecho este mismo logo es un botón que al pulsarlo cambiamos automáticamente de perfil. Esto me parece simplemente genial.
Vamos a la parte de abajo del teclado. Para darle la vuelta por primera vez lo sujetamos entre nuestras manos y nos damos cuenta de que la calidad de construcción es realmente buena. Se trata de un teclado muy robusto y pesado.
Como vemos en esta parte de abajo abundan las patas de goma para evitar que el teclado se deslice sobre la mesa cuando lo estamos utilizando.
Las patas elevadoras también cuentan con pies de goma antideslizante, y esto siempre es de agradecer.
En este teclado además hay 4 patas de goma, así que podemos elevar la posición del mismo totalmente y no solo inclinarlo. Para todos los gustos.
El reposamuñecas es extraíble, y también cuenta con patas de goma.
En el centro de esta parte trasera tenemos la típica etiqueta identificativa.
Como hemos comentado hace un momento, el reposamuñecas se puede poner y quitar. Esto reduce considerablemente el tamaño total del teclado, dado que es bastante grande.
Este Aivia Osmium de Gigabyte cuenta con dos puertos USB, uno 2.0 y otro 3.0. El USB 2.0 está ubicado justo encima del pad numérico.
Y el USB 3.0 junto con los dos minijacks de audio está ubicado en el lateral, a nuestro parecer una posición bastante más cómoda para insertar, por ejemplo, un pendrive.
Y por cierto en el lateral opuesto encontramos este logo en relieve.
Una pega que le he encontrado a este teclado es que al contar con tantísimas conexiones y opciones, su cable es muy, muy grueso. Además hay que tener en cuenta que está mallado para protegerlo, lo que aumenta todavía más su grosor.
Aquí lo vemos. El cable mide 2 metros en total.
Al metro y medio de cable, éste se difumina en los diversos conectores: uno USB 2.0, un USB 3.0, y los dos minijacks de audio. Por cierto que, siguiendo en la tónica general de este teclado, Gigabyte ha tenido en cuenta cada detalle y todos los conectores están chapados en oro para maximizar la conductividad de los mismos y además protegidos por capuchones de plástico.
Junto con el teclado se incluye una pequeña guía de uso.
Y como vimos al principio, la herramienta para extraer teclas y 4 teclas con diferentes iconos para las macros.
TESTEO.
Conectamos el Gigabyte Aivia Osmium al ordenador y comenzamos a probarlo. Vamos a empezar viendo la iluminación. Como comentamos al principio, el logo de Aivia en la parte superior derecha se ilumina en diferentes colores dependiendo del perfil que tengamos activado. Estos colores y el número de perfiles por supuesto se pueden configurar mediante el software.
Aquí podemos ver el teclado iluminado con la habitación con luz. Aunque la habitación es bastante luminosa, la retroiluminación en blanco del teclado se puede apreciar a simple vista.
Pero ahora vamos a apagar la luz para que veáis lo impresionante que queda. A mi personalmente me ha encantado. Muchos teclados con retroiluminación han pasado por mis manos, y mi color preferido siempre ha sido el blanco, ya que me parece estéticamente más bonito y daña menos la vista cuando estás con la luz apagada. Teclados que cuentan con diversos colores de iluminación, al seleccionar el color blanco terminan mostrando un blanco que es más bien azulado, pero este Aivia Osmium al contar con un único color muestra un blanco luminoso de verdad. Me ha encantado.
Antes de contaros qué tal funciona este teclado, dado que integra un HUB USB 3.0 hemos decidido probarlo con un pendrive de gama alta, en concreto un Kingston Datatraveller HyperX 3.0 de 64 Gb.
Y este ha sido el resultado.
Un resultado realmente estupendo, funcionando al máximo que da esta unidad USB 3.0. Por otro lado, también hemos aprovechado para probar este mismo pendrive en el HUB USB 2.0 del teclado, y este ha sido el resultado.
De nuevo, el máximo ratio que da el estándar USB 2.0. Poco que añadir, ambos HUB USB del Aivia Osmium funcionan a la perfección.
Vamos a pasar ahora a ver el software. Éste no viene incluido en un CD junto con el teclado, así que hay que descargarlo del sitio web de Gigabyte. Dejando eso de lado, tras instalarlo y reiniciar el sistema, al abrirlo vemos esta pantalla, desde la cual al parecer podremos seleccionar cualquier dispositivo Aivia que tengamos conectado a nuestro equipo, al más puro estilo Razer Synapse. Desde aquí también podemos acceder directamente a los foros de Aivia, al sitio web de Gigabyte, y podremos actualizar el software.
Comprobamos que tenemos la última versión del software.
Desde este software de configuración podemos hacer infinidad de cosas, desde controlar los perfiles y los colores de los mismos, configurar las teclas de Macros, crear macros y todo lo que se os ocurra. También cabe mencionar que Gigabyte ha integrado unas cuantas macros predefinidas, pero todas muy simples, nada específico para juegos como hemos visto en otros teclados como los Roccat.
A continuación os dejamos las diferentes pantallas del software a modo de galería. Recordad que para ver las imágenes en grande podéis hacer clic sobre ellas.
Vamos ahora a hablar del uso del teclado. Tengo que decir una cosa muy a favor de los teclados como este que utilizan mecanismos Cherry MX Brown en lugar de Cherry MX Red, y es que en escritura de textos largos como por ejemplo este análisis, resulta extremadamente más cómodo, y las manos y muñecas se cansan mucho menos que con los MX Red, y no solo eso, sino que mi tasa de pulsaciones por minuto ha subido considerablemente.
A continuación los resultados del test de mecanografía 10 fast fingers.
Con un teclado con mecanismos Cherry MX Red (Tesoro Durandal Ultimate).
Con el Gigabyte Aivia Osmium:
El resultado es evidente: 11 palabras más por minuto, y eso que me equivoqué las mismas veces (nunca he dado un curso de mecanografía, si bien considero que escribo bastante rápido en cualquier teclado). El número de pulsaciones en este teclado es mayor porque gracias a los mecanismos Cherry MX Brown no hay que esperar a que una tecla suba del todo para poder volver a pulsarla, y tal y como explicamos en la guía de mecanismos Cherry MX.
Llegados a este punto, ya hemos visto que con este teclado se escribe sensiblemente más rápido y además es más cómodo. Vamos a hablar ahora acerca de su rendimiento en juegos. Para probarlo hemos utilizado básicamente tres juegos que corresponden a tres tipos de juego diferentes: League of Legends (donde básicamente se usan solo las teclas QWER D y F), Neverwinter Online (un MMORPG donde se usan las típicas WASD además de tabulador QER 1 y 2), y el BattleField 3 (WASD, R, E, F, etc.).
Dicho esto, tengo que decir que el rendimiento ha sido óptimo, no he notado una gran diferencia con respecto a otros teclados con Cherry MX Red. Los tiempos de respuesta son ideales, y el teclado sigue resultando tan cómodo como escribiendo, quizás más cómodo incluso que otros teclados. De hecho, exceptuando el Logitech Illuminated Keyboard me atrevo a decir que este Gigabyte Aivia Osmium es el teclado que más cómodo me ha resultado después de éste, tanto para jugar como para escribir.
Como punto negativo tengo que decir que aunque cuenta con muchos soportes de goma antideslizante en la base, éstos no han funcionado del todo bien en mi mesa de madera lacada. Escribiendo no tuve ningún problema, pero en sesiones intensas de juegos donde estás en tensión sí que tuve que parar un momento para recolocar el teclado en su sitio dado que lo había empujado hacia delante sin darme cuenta. Esto es, evidentemente, porque las patas de goma no han hecho demasiado bien su función.
CONCLUSIÓN.
El Gigabyte Aivia Osmium es un teclado que sin duda está en el «top» de la gama alta. Sus mecanismos Cherry MX Brown funcionan de una forma extraordinaria para escribir textos largos, y además resultan extremadamente cómodos. Ha mejorado mi velocidad de escritura y ha respondido estupendamente bien en sesiones intensas de juegos. ¿Qué más se le puede pedir? Sencillo, que tenga un HUB USB 3.0, y lo tiene y además funciona a máxima velocidad. Por si eso fuera poco, la calidad de materiales que Gigabyte ha empleado en este teclado es estupenda.
Por ende, aunque el precio de este Aivia Osmium está alrededor de 110 euros, creo que para personas exigentes que utilizan el ordenador durante muchas horas es una compra segura.
PROS:
- – Calidad de materiales y de construcción.
- – Mecanismos Cherry MX Brown.
- – Retroiluminación estupenda.
- – Altamente configurable.
- – Teclas dedicadas para Macros.
- – HUB USB 3.0 y 2.0.
- – Comodísimo.
CONTRAS:
- – Las patas de goma no agarran todo lo bien que desearía.
- – Es un poco caro (110 euros).
- – Macros preconfiguradas demasiado sencillas y escasas.
PUNTUACIÓN:
Por todo ello, desde HardZone recomendamos este Gigabyte Aivia Osmium por su rendimiento y le damos nuestro galardón de oro.