Corsair es un fabricante bien conocido por todos, con un catálogo que va desde las memorias RAM, donde empezaron y son especialistas, hasta sistemas de refrigeración, cajas, fuentes de alimentación y todo tipo de periféricos Gaming para PC. En el día de hoy os vamos a presentar nuestro análisis de la última incorporación a su familia de ratones, el nuevo Corsair M65 Pro RGB que llega como actualización del anterior Vengeance M65 con un sensor mejorado e iluminación RGB.
Y es que Corsair ha subido la apuesta integrando en el M65 Pro RGB un sensor óptico capaz de detectar hasta 12.000 puntos por pulgada (DPI) lo que, aunado a su sistema de calibrado de superficie, garantiza la máxima precisión en cualquier tipo de situación. Además Corsair mantiene la estructura y base de aluminio de gran calidad que hace que el ratón tenga una sensación de calidad incomparable, a la vez que lo dota de un bajo peso. Y hablando de peso, el M65 Pro RGB incorpora un sistema de pesas mediante el que podremos variar el peso del dispositivo hasta 20.5 gramos.
Corsair dice que el M65 Pro RGB tiene agarre híbrido, siendo ideal tanto para usuarios con agarre de tipo palma como para los de tipo garra, pero en todos los casos está optimizado para juegos FPS (Shooters) por su diseño (y de hecho Corsair así lo especifica en su web), pues además de ser ligero tiene cambio de DPI «al vuelo» y un botón «sniper» mediante el que bajar los DPI al mínimo para obtener la máxima precisión al disparar. Además incorpora botones extra anchos y una rueda de scroll de gran tamaño para que resulte mucho más fácil pulsarla durante el juego.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Tomadas de la web del fabricante.
Como podemos ver el M65 Pro RGB tiene en cuanto a características un calco de lo que tenía el Vengeance M65, con la excepción claro del sensor óptico que tiene una sensibilidad ajustable de entre 100 y 12.000 DPI. Cuenta con tres zonas de iluminación RGB configurables, de igual manera que se puede configurar la tasa de refresco (que normalmente la tendremos en 1000 Hz para un menor tiempo de respuesta) y el peso, pudiendo variarlo entre 115 y 135,5 gramos con el sistema de pesas de la zona inferior.
ANÁLISIS EXTERNO.
Corsair embala el M65 Pro RGB en el habitual paquete de cartón semi rígido que se abre en forma de libro para poder ver el ratón a través de un plástico transparente protector. En la cara principal encontramos una imagen del dispositivo y sus principales características resumidas, destacando que se trata de un ratón para juegos FPS, los 12.000 DPI de su sensor y el sistema de iluminación en 16.8 millones de colores, mientras que en la parte trasera lo que tenemos son sus principales características explicadas en tres croquis.
En uno de los laterales Corsair nos da una explicación un poco más detallada del sensor y del sistema de color, mientras que en el otro enumera el contenido del paquete y los requisitos de sistema. En el interior del embalaje exterior, como siempre tenemos otro más de color amarillo que envuelve el ratón.
Como accesorios, Corsair incluye únicamente los habituales folletos sobre la garantía y la guía de uso rápido.
Ya fuera de la caja, aquí tenéis el Corsair M65 Pro RGB.
Vamos a comenzar a ver todas sus partes. Como podéis apreciar tiene un diseño asimétrico, con el logo de Corsair en la zona de la palma que se iluminará cuando el dispositivo esté conectado al PC.
Aquí tenéis los botones principales, la rueda, y los botones de cambio de sensibilidad al vuelo.
En el lado izquierdo nos encontramos con los dos botones habituales de navegación y el enorme botón de «Sniper» en color rojo. Como podéis ver es un ratón para diestros, con ésta zona específica para colocar el dedo pulgar.
Aquí en la zona derecha no hay nada destacable.
Volteamos el dispositivo y lo que más llama la atención es, aparte del aluminio cepillado de color negro que conforma toda la base, el sistema de pesos. Cada una de las tres piezas nos permite restarle peso al ratón hasta dejarlo en 115 gramos si las retiramos todas, pudiendo quitar solo una o dos si queremos para cambiarle el centro de gravedad al ratón. También cabe mencionar el uso de cuatro generosas patas de teflón deslizante y, cómo no, el sensor óptico de 12.000 DPI en el centro de todo.
El cable del ratón sale del lado derecho del dispositivo (izquierdo si lo tenemos volteado como en la imagen), con una pieza de goma para proteger su integridad.
El cable mide 1,8 metros de longitud y está mallado con un entramado de hilo de nailon para protegerlo. Termina en un conector USB 2.0 bañado en oro como es habitual.
TESTEO.
Visto el ratón es hora de conectarlo al equipo y comenzar a probarlo, y nada más hacerlo como siempre el ratón se ilumina.
El software.
A estas alturas ya conocemos bien CUE, el software multiperiférico de Corsair. Vamos a ver el relativo únicamente al ratón que hoy nos atañe.
En la pantalla principal lo que tenemos son las asignaciones de los botones y los perfiles, como es habitual. Podemos configurar los ocho botones de la manera y con la acción que queramos, incluyendo macros o acciones predefinidas.
La segunda pestaña es la correspondiente a la iluminación, donde podremos configurar color y efecto de manera independiente en dos zonas.
En la siguiente pestaña tenemos la zona de rendimiento, donde podremos configurar cinco niveles diferentes que podremos cambiar directamente desde los botones ubicados detrás de la rueda. La zona central entre los botones es un LED indicador que se iluminará dependiendo del perfil que tengamos seleccionado, color que podemos configurar en ésta pantalla precisamente. Son cinco los saltos, mas el de Sniper.
En las opciones del dispositivo podemos actualizar el firmware y acceder a la calibración de superficie, además de seleccionar el tiempo de respuesta del ratón.
El calibrado de superificie funciona de manera muy sencilla: el sensor óptico es al fin y al cabo una cámara, capaz de analizar la superficie en la que utilizamos el ratón y adaptarse a ésta.
El M65 Pro RGB en funcionamiento
El Corsair M65 Pro RGB es un ratón diseñado para juegos FPS, pero ni siquiera los profesionales de éste tipo de juegos se limitan solo a éste género y por ello hemos estado probando el dispositivo en títulos de todo tipo que incluyen los habituales League of Legends y Star Wars Battlefront, pero también le hemos estado dando unas cuantas horas al Counter-Strike: Global Offensive para hacer honor a aquello de lo que presume el ratón.
Ya sabéis, si habéis leído otros de mis análisis de ratón, que soy usuario con manos bastante grandes y con estilo de agarre tipo garra. El M65 Pro RGB efectivamente me ha resultado cómodo desde el principio sin tener que cambiar mis costumbres, hecho que se ha visto maximizado porque me ha permitido configurar la sensibilidad a los 2200 DPI a los que estoy acostumbrado, algo que sinceramente cuando llevas 20 años utilizando ordenadores para jugar es muy de agradecer, pues cuesta y mucho cambiar unas costumbres tan arraigadas. Por éste motivo, el M65 Pro RGB me ha resultado cómodo desde el primer momento y el tiempo de adaptación ha sido casi nulo.
He de mencionar que en mi caso no he quitado ninguna de las pesas, si bien para un juego de tipo FPS sería recomendado pues los movimientos serían más rápidos y firmes al restar peso y por lo tanto inercia al movimiento del ratón. No obstante ésto sería más para usuarios con agarre de tipo palma, no para tipo garra como yo.
El sensor óptico de hasta 12.000 DPI que Corsair ha instalado en el M65 Pro RGB se ha mostrado muy seguro en todo tipo de situaciones y juegos, si bien es cierto que en todos los casos lo he utilizado con alfombrilla (una Corsair MM300 Extended precisamente) ya que como ratón óptico que es, necesita una alfombrilla para un máximo rendimiento.
Pero no todo iba a ser canela fina con éste ratón, y es que como me ha ocurrido en casi todos los ratones Corsair que he analizado me he encontrado con unos botones laterales un tanto incómodos de utilizar porque su tamaño es relativamente pequeño y están muy pegados el uno al otro. Añoro el día en el que los fabricantes decidan colocar los botones laterales como lo hizo Microsoft en su día con el Sidewinder X8, no he encontrado una disposición más cómoda jamás.
CONCLUSIÓN.
Corsair ha cogido el que era uno de los mejores ratones Gaming para juegos tipo FPS y lo ha mejorado todavía más con un sensor que hará las delicias de aquellos a los que les gusta jugar con resoluciones muy elevadas. No solo el sensor se ha comportado a la perfección en cualquier tipo de juego, sino que efectivamente ese botón adicional «Sniper» en el lateral nos proporciona una clara ventaja en éste tipo de juegos para poder apuntar con la máxima precisión (especialmente bueno, valga la redundancia, cuando jugamos con un arma de francotirador).
El M65 Pro RGB nos proporciona un rendimiento excepcional en cualquier ámbito, una gran comodidad y una amplia personalización. Es cierto que cuesta unos 70 euros y que hay ratones de similares características más baratos, pero Corsair marca la diferencia en cuanto a la calidad de materiales utilizados, solo igualados en éste caso por G.Skill.
PROS:
- Excelente rendimiento en cualquier tipo de juego.
- Botón Sniper adicional que proporciona gran ventaja en juegos tipo FPS.
- Amplia capacidad de personalización a través del software.
- Muy cómodo desde el primer momento.
- Sensor de hasta 12.000 DPI configurable en cinco saltos de 50 en 50.
- Iluminación RGB en tres zonas.
- Memoria interna que almacena toda la configuración.
- Estupenda selección de materiales.
- Sistema de gestión de peso.
CONTRAS:
- Los botones laterales quedan un tanto incómodos para usuarios de manos grandes.
- Quizás se me hace un poco caro. Si costara 60 y no 70 euros no habría discusión al respecto.
Por todo ello, creemos que el Corsair M65 Pro RGB se merece nuestro galardón de Platino, así como nuestra recomendación por su excelente rendimiento.