El otro día os contábamos que Toshiba había ampliado su familia de memorias Flash Transmemory con los modelos EX-II de hasta 128 GB de capacidad, y hoy venimos a contaros nuestras impresiones personales con una de estas unidades. Se trata de «pendrives» con interfaz USB 3.0 disponibles en capacidades de 32, 64 y 128 GB y que presumen de unas vertiginosas velocidades de transferencia (hasta 222 MB/s de lectura y 205 MB/s de escritura), especialmente pensadas para manejar archivos de gran tamaño.
Estos pendrives Toshiba Transmemory EX-II cuentan con chips de memoria NAND DDR (Double Data Rate) de Toshiba, y según los cálculos del fabricante podrán leer y escribir archivos de vídeo de 25 GB en menos de 5 minutos, 22 veces más rápido que una unidad USB 2.0 de máxima velocidad (que por cierto son retrocompatibles con puertos USB 2.0 y 1.1). Además, estas nuevas unidades Toshiba Transmemory EX-II de hasta 128 GB soportan software que habilita que unos bloques de datos en particular queden protegidos mediante contraseña, de manera que el usuario puede configurar archivos en el interior para evitar su acceso si no se conoce una contraseña configurada de antemano.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Sacadas de la web del fabricante.
Las especificaciones técnicas no nos dicen mucho más allá de lo que sería una unidad flash convencional con interfaz USB 3.0. No obstante como hemos comentado al principio estas unidades Transmemory EX-II de Toshiba incorporan chips de memoria DDR del propio fabricante, con una controladora propia que permite alcanzar unas elevadas velocidades de lectura y escritura especialmente pensadas para archivos de gran tamaño. Lógicamente quien compra un pendrive de 128 GB no lo quiere precisamente para manejar poca información, ¿verdad?
ANÁLISIS EXTERNO.
Toshiba ha decidido embalar estos dispositivos de almacenamiento flash en una caja de cartón blando en cuya cara principal ya podemos ver una imagen del aparato con sus principales características, tales como la interfaz USB 3.0 y sus velocidades de lectura y escritura, amén de su capacidad.
En la cara anterior del embalaje tenemos unas cuantas aclaraciones sobre la cantidad de bytes a las que equivale 1 GB, velocidades de lectura y escritura teóricas tanto en USB 2.0 como USB 3.0 y un ejemplo de cuánto se tardaría en transferir un archivo de vídeo de 25 GB utilizando sendas interfaces.
Abrimos el embalaje y vemos que Toshiba ha protegido la Transmemory EX-II de 128 GB que nos ha enviado en un blíster de plástico abierto en el interior.
Curiosamente, por dentro del propio embalaje (y para el que hay que romper el cartón para acceder) encontramos impresas una serie de advertencias de seguridad en varios idiomas.
Aquí podéis ver la unidad Toshiba Transmemory EX-II de 128 GB con la caperuza puesta. Es una unidad de tamaño normal, no es más grande que otras unidades incluso de menor capacidad como veremos un poco más adelante, y destaca que la cubierta plateada exterior es de aluminio, signo de calidad de construcción.
Otras vistas de la unidad.
En la siguiente imagen podéis ver su tamaño comparado con otras unidades, tanto nuevas y USB 3.0 como alguna antigua USB 2.0.
TESTEO.
Conectamos la unidad a nuestro equipo de pruebas y la echamos a funcionar. Hay que decir, una vez más hablando del tamaño, que no da ningún problema de compatibilidad con puertos adyacentes. A pesar de su gran capacidad (128 GB, recordemos), tiene un tamaño bastante comedido.
El software.
Como comentábamos al principio, estas unidades Toshiba Transmemory EX-II cuentan con un software de cifrado propio de la compañía que nos permite escoger una porción de su capacidad para proteger su contenido con contraseña. Para hacerlo, se incorpora el software EX II Pad Locker que nos permitirá configurar la unidad como nosotros queramos de manera fácil y rápida.
Tanto el software como las instrucciones de utilización vienen en la propia memoria.
Aquí tenéis la pestaña principal del software, que simplemente nos muestra el estado de la unidad.
La aplicación permite configurar como «área protegida» la cantidad de memoria que queramos de la unidad, dejando un mínimo de 32 MB sin proteger. Funciona de una manera que no podría ser más sencilla: solo tenemos que deslizar la barra a la cantidad que queramos y darle al botón de Setup. El programa nos pedirá una contraseña y el resto lo hará automáticamente.
Una vez configurado, el sistema crea dos particiones en la unidad, una llamada «Free Area» y otra «Protceted» (lógicamente han tenido un error gramatical aquí) a la que solo podremos acceder si arrancamos EX II Pad Locker e introducimos la contraseña.
Aquí podéis verlo, error gramatical incluido.
También se incluye una función para formatear la unidad, y nos advierte que aunque formateemos la contraseña seguirá intacta.
Sin embargo aquí hemos encontrado un problema, y es que la unidad por defecto viene formateada como exFAT, un sistema de archivos propietario de Microsoft que tiene una desventaja en este caso pues el tamaño máximo de archivo que es capaz de manejar es de 16 GB, y si pretendemos manejar Blu-Rays de 25 GB o más no podremos.
Por ello nos vimos obligados a formatear la unidad y establecer el sistema de archivos en NTFS para poder utilizar archivos de más de 16 GB con el Transmemory EX-II.
Visto este apartado, vamos allá con las pruebas.
CrystalDisk Mark
Este famoso benchmark nos entrega un rendimiento muy parecido a lo prometido por el fabricante, y de hecho la velocidad de lectura es todavía mayor, aunque la de escritura un tanto inferior. Sorprendentemente se lleva bastante bien con archivos de pequeño tamaño, el punto débil de este tipo de unidades, entregando una velocidad de lectura superior a 5.5 MB/s.
HD Tune
HD Tune por su parte nos muestra una tasa de transferencia que por encima de todo es tremendamente estable, siempre manteniéndose entre 165 y 180 MB/s, con una media de 170 MB/s y un ínfimo tiempo de acceso de 0.7 ms. Son unas cifras impresionantes para una unidad flash USB 3.0.
Copia real de archivos.
Más allá de los tradicionales benchmarks, hemos querido poner a prueba la característica de la que presume Toshiba en este Transmemory EX-II de 128 GB, y es la copia de archivos de gran tamaño. Para ello hemos utilizado un archivo de vídeo en Full HD de 22.4 GB transferido directamente desde el SSD instalado en el sistema (un Toshiba HG6 que ya analizamos en el pasado).
Durante la copia, la velocidad se mantuvo en todo momento por encima de los 170 MB/s, y efectivamente el tiempo fue inferior a 2 minutos, de nuevo con una transferencia muy estable sin picos.
CONCLUSIÓN.
Parece increíble lo que avanza la tecnología, y este Toshiba Transmemory EX-II de 128 GB es la prueba de ello. En un pendrive que no ocupa más espacio que los de hace años podemos almacenar 128 GB de lo que queramos y nos proporciona una actuación impecable en lo que a rendimiento se refiere, sacando prácticamente el máximo potencial de la interfaz USB 3.0. Además Toshiba incluye un útil software para proteger el contenido con contraseña, pudiendo escoger qué porción de la unidad queremos proteger.
El Toshiba Transmemory EX-II está actualmente a la venta en el Reino Unido a un precio que ronda las 79 libras. En teoría no debería tardar en llegar a España y tendrá un precio que seguramente ronde los 90 euros, lo cual no está mal teniendo en cuenta su capacidad y lo que nos ofrece.
PROS:
- Enorme capacidad de almacenamiento.
- Excelente rendimiento.
- Construcción sólida.
- No es muy grande.
- Posibilidad de proteger el contenido con contraseña.
- Buena relación prestaciones / capacidad / precio.
CONTRAS:
- Se calienta bastante.
Por ello creemos que esta unidad Toshiba Transmemory EX-II de 128 GB se merece nuestro galardón de Oro y además nuestra recomendación por su excelente rendimiento.