Durante el CES de éste año, Corsair presentó todas sus novedades para el año entre las que se podían encontrar teclados, ratones, fuentes de alimentación y cajas para PC. Una de las mayores novedades fue sin duda el anuncio de su nuevo ratón tope de gama, el Scimitar Pro RGB que viene a ser una versión mejorada de su anterior Scimitar RGB que ya analizamos en su día al que le han puesto un sensor que permite una mayor sensibilidad (de 12.000 DPI pasa a 16.000 DPI) y le han incorporado un sistema de perfiles por hardware más amplio y que permite una mayor personalización.
Mantiene eso sí el mismo diseño estético y funcional, con sus doce botones configurables en la zona del pulgar y su exclusivo sistema deslizante que permite mover su posición para adaptarse a nuestra mano. Es, por lo tanto, el mismo ratón tope de gama para juegos MMO pero optimizado.
En mi caso, reconozco que me hago un lío con tantos botones en el lateral y desde ya os digo que me gusta más el diseño de otros fabricantes que los ubican en forma circular para que sean fácilmente identificables. No obstante, también conozco personalmente a jugadores que emplean ratones con botonera lateral y le sacan el máximo partido, asignando macros personalizadas a cada uno de los 12 botones laterales para obtener una ventaja en los juegos, especialmente tipo MMO como World of Warcraft o Final Fantasy XIV.
Y es que casi todos los fabricantes que tienen productos Gaming en su catálogo cuentan con un ratón de similares características. Éste es el segundo de Corsair, siendo una versión mejorada del primero, y dado que se trata de un ratón cuyo precio ronda los 100 euros tendremos que exigirle el máximo en nuestro análisis. El Scimitar RGB ya era un gran ratón -dejando de lado que a mi me guste o no la botonera lateral, es estupendo- así que el listón está bastante alto para éste Scimitar Pro RGB. Veamos si el extra de precio vale la pena o no, pues como os decíamos el ratón es en diseño el mismo y las mejorías que veremos son meramente técnicas, incluyendo por supuesto de software.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
Tomadas de la web del fabricante.
Estamos como os adelantábamos antes ante un ratón que es en cuanto a diseño un calco de su predecesor, incluso con el mismo tamaño y peso exactos, con la única diferencia técnica en un sensor óptico de mayor sensibilidad que sube de 12.000 a 16.000 el máximo, amén de los perfiles de configuración por hardware. Por supuesto el Scimitar Pro RGB tiene las mismas cuatro zonas de iluminación RGB y sus 17 botones configurables.
A destacar también que, como no podía ser de otra manera en un ratón de éstas características, cuenta con memoria interna de manera que una vez que configuremos los perfiles, macros y asignaciones de botones y los guardemos en la memoria del ratón, nos aseguramos que funcionarán en cualquier ordenador al que conectemos el dispositivo independientemente de si tiene el software (CUE) instalado o no. Ésto es una gran ventaja pues en algunos ratones de la competencia es necesario el software para que funcionen los perfiles, de manera que no solo tendremos ésta molestia sino que además siempre habrá un retardo extra porque las macros tendrán que «leer» el software para ejecutarse en lugar de hacerlo directamente.
Poco más que destacar. Su sensor tiene una frecuencia de respuesta máxima de 1000 Hz aunque es configurable (algo que considero absurdo pues un Gamer siempre querrá el menor tiempo de respuesta posible), así como configurable es su sensibilidad entre 100 y 16.000 DPI en saltos de 100 en 100. También comentar que se mantienen los interruptores mecánicos en la botonera lateral para tener una mayor sensibilidad a la presión y una respuesta táctil en el dedo para evitar pulsaciones involuntarias.
ANÁLISIS EXTERNO
El Corsair Scimitar Pro RGB viene embalado en la habitual caja que el fabricante emplea en todos sus periféricos, en cuya cara principal podemos ver una imagen del dispositivo a tres cuartos mostrando por supuesto su botonera lateral, principal característica del ratón, así como sus principales beneficios resumidos en la zona inferior y superior en forma de icono.
Ésta cara frontal se abre en forma de libro permitiéndonos ver el dispositivo escondido tras una cubierta de plástico transparente en la parte derecha y un resumen con croquis de las facultades de la botonera lateral en la parte izquierda. Por cierto que el Scimitar Pro RGB está disponible en dos versiones: una amarilla (la que nos han enviado y que podéis ver aquí) y otra completamente en negro, algo más discreta.
En la parte trasera de la caja lo que tenemos es un nuevo croquis pero ya centrado en las demás partes del ratón, dejando para los laterales el contenido de la caja y sus características técnicas y requisitos de sistema.
En el interior el fabricante incluye un par de folletos, uno para información sobre la garantía y el otro una guía de uso rápido.
Así mismo tenemos una herramienta para poder modificar la posición de la botonera lateral. Luego veremos cómo funciona.
Vistos los accesorios es hora de sacar el ratón de su caja y verlo.
Aquí tenéis el Corsair Scimitar Pro RGB.
En esta vista superior ya podéis ver el diseño ergonómico, evidentemente pensado para usuarios diestros. Incluso la botonera tiene cierta curvatura para adaptarse mejor a la forma del dedo pulgar. El logo de Corsair en la zona de la palma se iluminará cuando el dispositivo esté conectado, y podemos ver también los dos botones superiores, inicialmente configurados para que uno cambie entre perfiles y el otro cambie de resolución al vuelo según la tengamos configurada en el software.
Vista frontal, con los dos botones principales de clic y la rueda, la cual va «en el aire» y tiene una inserción de goma estriada para que no se resbale. La rueda también se ilumina.
Aquí está la botonera lateral, con sus 12 botones dedicados que podremos configurar más tarde. A destacar que ésta zona (la amarillas) está fabricada en metal y se nota muy agradable al tacto a la par que resistente. En seguida vemos en detalle la botonera, pero primero vamos a ver el resto de partes del ratón.
El lateral opuesto tiene un diseño específicamente pensado para usuarios de tipo palma, lógico si quieren utilizar la botonera. En ésta zona hay una inserción de goma para mejorar el agarre.
En la zona inferior vemos el sensor en pleno centro en una pieza metálica, además de cuatro grandes patas de teflón deslizante y la rueda «al vuelo».
También en ésta zona inferior tenemos un tornillo que podremos ajustar con la herramienta que vimos en los accesorios. Ésto nos permitirá poder deslizar la botonera lateral para ponerla en la posición que más nos guste.
Podéis verlo en la siguiente galería.
Poco nos queda ya por ver. En la parte frontal tenemos en la izquierda otra zona más de iluminación, y la salida del cable a la derecha con una pieza de goma endeble para asegurar su integridad.
El cable viene como siempre mallado con hilo de nailon, muy resistente al desgaste.
El cable, de 1,8 metros de longitud, termina en el habitual conector USB 2.0 que Corsair utiliza en todos sus periféricos.
TESTEO
Conectamos el dispositivo a nuestro equipo de pruebas y comenzamos a probarlo. Lo primero que hay que ver es por supuesto su iluminación en cuatro zonas.
El ratón tiene iluminación RGB pero ojo, por zonas. Ésto significa que podremos configurar independientemente el color del logo de la palma, de la rueda, de la parte frontal y de la botonera, pero ésta última tendrá siempre el mismo color, o en otras palabras, no podremos configurar un color diferente para cada uno de los 12 botones de ésta zona. Por cierto que en la zona de la botonera hay una luz adicional en la parte izquierda que será la que nos muestre en qué perfil estamos (cambia según tengamos seleccionado un salto de DPI u otro. Es también configurable).
El software
Vamos a ver qué nos ofrece CUE (Corsair Utility Engine), el software del fabricante, con éste dispositivo.
De inicio en la zona de dispositivos nos ofrece configuración para su frecuencia de sondeo, el nivel de brillo, actualización de firmware y en éste caso un botón dedicado a borrar todo lo que tenga almacenado en memoria, algo que considero muy útil en un ratón de éstas características. Fijaos también en la zona superior izquierda que tenemos tres perfiles «Scimitar Pro HW» ya cargados, lo que nos permitirá configurar lo que queremos que haga el dispositivo como si fueran tres ratones completamente diferentes.
Por supuesto CUE es un software que integra todos los periféricos de la marca. Podéis ver que rápidamente podemos cambiar entre el ratón y el teclado, en éste caso un K70 RGB Rapidfire.
Vamos con el ratón. Lo primero que nos ofrece el software es configurar las acciones de los botones, incluyendo los 12 de la botonera lateral y todos los demás a excepción del clic izquierdo y el de cambio de perfil. Es decir, de los 17 botones del Scimitar Pro RGB, podemos configurar 15 de ellos. Como siempre, podemos crear y asignar macros, acciones específicas, pulsaciones, inicio de programas o lo que nos de la gana. Las posibilidades son enormes.
Así mismo tenemos configuración de las zonas de iluminación. A destacar que ahora el software es mucho más completo que en su versión anterior pero considero que en la antigua era mucho más sencillo el crear efectos y demás con la iluminación. Corsair lo ha hecho más complicado, aunque ahora es más completo. Tiene lo bueno y lo malo.
La siguiente pantalla nos permite configurar los saltos de sensibilidad, hasta cinco en total mas el «Sniper» (manteniendo pulsado el botón que asignemos como Sniper, la resolución bajará a un nivel que configuremos aquí para poder apuntar con la máxima precisión). Como podéis ver los saltos se pueden hacer de 100 en 100 DPI, y podemos asignar un color a cada perfil que será en el que se ilumine la zona izquierda de la botonera. También permite activar o desactivar los perfiles, así que podremos tener entre 1 y 5 saltos de sensibilidad mas el Sniper. Fijaos también que en la zona izquierda podemos hacer una configuración independiente para cada uno de los tres perfiles de hardware.
En la pestaña rendimiento lo que podemos hacer es configurar la altura de elevación y la velocidad del puntero.
Otra de las mejoras del sensor óptico que Corsair ha instalado en éste ratón es la posibilidad de hacer calibración de superficie. El sensor analiza la alfombrilla y modifica su rendimiento en consecuencia.
Aquí lo podéis ver en acción.
Finalmente, tenemos la última pestaña que es la que nos permite almacenar los distintos perfiles en el dispositivo.
Probando el Scimitar Pro RGB
He estado utilizando éste Corsair Scimitar Pro RGB durante varios días en todo tipo de juegos, pero esencialmente en League of Legends, Battlefield 1 y Final Fantasy XIV: Heavensward, juego en el que por cierto dediqué un buen rato a configurar macros personalizadas con la intención de sacarle partido a la botonera lateral.
A destacar que he tardado bastante en acostumbrarme al ratón: está pensado para usuarios de tipo palma y yo agarro el ratón en tipo garra, por lo que no me ha resultado del todo sencillo especialmente para utilizar la botonera lateral. Jugando al Final Fantasy XIV con las macros ya configuradas en la botonera lateral tardé más de 10 horas de juego real en no equivocarme al pulsar las macros, y aun así terminé utilizando solo tres o cuatro de los botones y haciendo las demás acciones como siempre, desde el teclado.
Me ha resultado muy complicado, aunque repito lo que dije al principio, a mi no me gustan éste tipo de ratones, no estoy acostumbrado a ellos y no les saco mucho partido, pero hay gente que sí lo hace. En cualquier caso tengo que decir que las asignaciones se ejecutan de manera inmediata, sin retardo y a la perfección. Hay que dedicarle bastante tiempo a la configuración, eso sí, especialmente si quieres hacer acciones avanzadas.
En lo relativo al rendimiento otro gallo es el que canta. El sensor del Scimitar Pro RGB se comporta de manera impecable -en mi caso configurado a 2200 DPI- en todo tipo de juegos, mostrándose preciso en todo momento y todos los juegos. Claro que como usuario con agarre tipo garra que soy muchas veces pulsaba botones laterales sin querer y la «liaba», aunque gracias a que cuenta con cambio de perfil de hardware desde un botón dedicado solo tuve que pulsarlo para pasar a un perfil sin asignaciones y dejar de tener problemas.
Una vez acostumbrado al ratón el rendimiento ha sido, como decía, impecable en todo tipo de juegos, incluyendo en el Battlefield 1 donde me gusta jugar francotirador y se necesita una gran precisión y velocidad de movimientos. Desde luego Corsair sabe hacer ratones y el Scimitar Pro es la prueba de ello.
CONCLUSIÓN
El Corsair Scimitar Pro RGB es un ratón al que cuesta un tanto acostumbrarse si nunca has usado botoneras laterales, pero que una vez lo haces se convierte en una potente herramienta de victoria en cualquier tipo de juegos, especialmente MMORGPGs. Se muestra solvente en cualquier tipo de juegos y acciones, con respuestas instantáneas y una precisión impecable. Además, gracias a que utiliza perfiles de memoria internos su capacidad de personalización es ahora todavía más grande, algo que hará las delicias de los aficionados a éste tipo de dispositivos.
PROS:
- Muy cómodo ergonómicamente hablando.
- Preciso en cualquier situación.
- Ingente capacidad de configuración.
- Gran calidad de materiales.
- 17 botones, 15 de los cuales son configurables.
CONTRAS:
- Tanto botón lateral necesita mucho tiempo de adaptación, e induce a pulsaciones involuntarias. Corsair podría plantearse el hacer una versión quizás con menos cantidad de botones pero en disposición circular para que sea más cómodo.
- Precio (unos 120 euros).
Por todo ello el Corsair Scimitar Pro RGB se lleva nuestro galardón de Oro y nuestra recomendación por su excelente rendimiento.