

Es indudable que el mercado que abarca el sector de las cajas para ordenador está en contínua evolución, y prueba de ello es el elevado número de novedades y mejoras que han salido al mercado en los últimos dos o tres años, además de la creación de nuevas marcas. BitFenix es una de esas marcas relativamente jóvenes, que ha puesto especial empeño en combinar la funcionalidad y las últimas tecnologías con una estética impresionante.
En esta ocasión, el proveedor CaseKing.de nos da la oportunidad de analizar a fondo una de las mejores cajas de BitFenix, la BitFenix Survivor Core, una caja con una estética un tanto conservadora pero a la vez bonita e impactante, sin descuidar la adición de las últimas tecnologías disponibles. En este análisis veremos como en el interior de esta caja de apariencia recatada puede esconderse una auténtica bestia.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
Sacadas de la web del fabricante.

Varias cosas a destacar entre sus características. La que más llama la atención es la inclusión de dos ventiladores de unos masivos 20 cm de diámetro (uno de ellos es opcional en esta versión Core). El siguiente punto que salta a la vista es que es capaz de albergar hasta 9 discos duros de 2.5″ o 7 de 3.5″. Además, y aunque no lo ponga en las características técnicas, esta caja puede albergar en su interior cualquier tarjeta gráfica del mercado actual si retiramos una de las cajas de discos duros, como veremos más adelante.
Cabe destacar que en este análisis hablaremos sobre la Survivor Core, que no incluye el ventilador frontal de 20cm ni conectividad USB 3.0, pero existe la versión Survivor (a secas), que incluye dicho ventilador y cuenta con dos puertos USB 3.0 frontales.
ANÁLISIS EXTERNO.
La BitFenix Survivor Core viene embalada en una caja de cartón sin color, en cuyo frontal no encontramos mas que el logotipo de BitFenix y la dirección de la página web de la marca.

Por la cara opuesta sí encontramos información interesante. Varios dibujos a escala de la caja nos muestran sus principales características, debajo del identificativo «Survivor Core».

En cuanto a las caras estrechas de la caja, solo una contiene información. Un nuevo dibujo a escala de la caja precede a las características técnicas de la misma.

Me parece interesante destacar el tamaño de la caja, que es bastante grande comparado con otras. En las siguientes fotografías podemos ver comparada esta caja con la de una Xigmatek Asgard II, de tamaño muchísimo menor. Como podemos apreciar la diferencia es bastante evidente.


Una vez abierta la caja de cartón, encontramos la Survivor Core convenientemente protegida por una bolsa de plástico y sendas piezas de poliexpán para evitar que la caja sufra el más mínimo daño durante su transporte.

Ya fuera de su caja y liberada de sus protecciones, encontramos la caja en todo su explendor. Como vemos, el aspecto es bastante robusto y compacto, a la vez que redondeado. El acabado SoftTouch de BitFenix es realmente agradable al tacto, y me recuerda mucho al material que se emplea en muchos ratones Gamer de la actualidad. En cuanto a la calidad de los materiales, es bastante buena, aunque la imprimación de la pintura no es de demasiada calidad, ya que desaparece en cuanto pones y quitas los tornillos dos o tres veces.

Ambos laterales son exactamente iguales. Iguales y monótonos. Ni una rejilla de ventilación. Llama la atención que el aspecto redondeado de la caja ha sido llevado también al lateral de ésta, terminando en la parte de atrás, pareciendo que la Survivor Core esté como «protegida» por una caperuza.

Por la parte de detrás encontramos el hueco para el ventilador de 120 mm en la parte de arriba (también tiene cuatro taladros para instalar un ventilador de 80mm si así se desea). Encima de éste se han habilitado dos taladros con protectores de goma para pasar los tubos de refrigeración líquida. El tercero de los agujeros, situado más a la derecha, está pensado para ser utilizado con los cables USB 3.0 que esta Survivor Core no trae de serie, aunque sí su hermana mayor. Debajo de las 7 ranuras PCI, encontramos el hueco para la fuente de alimentación que como vemos está ubicada en la parte inferior de la caja. En esta parte trasera hay un aspecto que no termino de entender. Los tornillos de los paneles laterales se retiran con thumbscrews, pero sin embargo éstos no pueden ser retirados si no quitamos las piezas de plástico ABS superior e inferior, y para ello debemos quitar cuatro tornillos convencionales en total. Por lo tanto, es imposible abrir y cerrar la caja sin herramientas.

En la parte delantera, fabricada al completo en plástico, encontramos tres bahías para unidades ópticas de 5.25″ justo encima de la rejilla por la que entrará el aire fresco al interior de la caja gracias al ventilador de 200mm que instalemos (o los 2 de 120mm). El logotipo de BitFenix adorna la parte superior de la caja, que cuando esté encendida se pondrá de color rojo. Como vemos, es una caja bastante ancha.

En la parte de arriba de la caja encontramos a primera vista la rejilla tras la cual se encuentra el ventilador de 20 cm que sí viene de serie con esta Survivor Core. En el centro de éste ventilador se encuentra un asa que podemos sacar pulsando sobre ella, y servirá para transportar la caja al completo de un lugar a otro cómodamente. A la izquierda de la imagen tenemos la parte de la conectividad. Cuatro puertos USB 2.0 (en la Survivor son 2 USB 2.0 y 2 USB 3.0), un puerto e-SATA, los dos minijacks de audio, botón de encendido, reset, y otro botón que enciende y apaga los LEDS de la caja. Por supuesto también están en esta parte los LEDs que indican que la caja está encendido y el de actividad de los discos duros.

Veamos en detalle la parte de la conectividad.

Hablando del asa. Cuando pulsas sobre ella, sale cómodamente de su sitio, pero el brazo se dobla hacia abajo. Es necesario mover un tornillo en el centro de ésta para que quede fija y pueda ser utilizada para transportar la caja.

En la parte inferior de la caja encontramos cuatro patas de goma para evitar deslizamientos indeseados si golpeáramos la caja por un descuido, y que a su vez ayudan a eliminar ruidos por vibraciones. En la izquierda de la imagen vemos la rejilla con filtro removible por la que entrará aire fresco a la fuente de alimentación.

Una vez vista la caja por fuera, vamos a abrirla a ver qué nos encontramos por dentro. Como dije anteriormente, es necesario retirar dos piezas de plástico con tornillos para poder retirar los paneles laterales.


Una vez retiradas estas dos piezas, ya podemos retirar los thumbscrews convencionales con la mano para abrir los paneles laterales.

Este es el aspecto que presenta la caja con los paneles ya retirados.

Vamos a empezar a analizar el interior. Lo que más llama la atención es el ventilador de 200mm incluído en la parte de arriba de la caja.

Dos cajetines para tres discos duros cada uno están claramente separados. El cajetín inferior está fijado al suelo de la caja, pero el superior se puede poner y quitar fácilmente según nos convenga. Esto es ideal si queremos instalar tarjetas gráficas de gran tamaño tales como la ATI Radeon HD 5970.


Este es el cajetín sacado de la caja. Cada cajetín cuenta con tres carcasas en las que podremos instalar sin ninguna dificultad discos duros convencionales de 3.5″.


En la parte superior nos encontramos con que los cables del panel de conectividad superior están unidos a una placa electrónica que está a la vista. Personalmente me habría gustado más que BitFenix hubiera elegido esconder esta placa, ya que no queda demasiado bien.

Justo debajo de los tres espacios para instalar dispositivos ópticos de 5.25″ se encuentra un adaptador para discos SSD y unidades de 2.5″ tales como disqueteras o rehobuses de ese tamaño.

Las unidades de 5.25″ se sujetan con tornillos convencionales. La verdad es que me hubiera gustado ver algún novedoso sistema de sujeción y no simples e incómodos tornillos.

En la parte de abajo, encontramos cuatro patas de goma convenientemente instaladas para soportar el peso de la fuente de alimentación. Estas patas tienen dos funciones: la primera es minimizar las vibraciones generadas por la fuente de alimentación y así reducir el ruido que emite, y la segunda es elevarla un poco sobre el filtro para así mejorar su ventilación.

En cuanto a las ranuras de expansión PCI, hay que decir que vienen excelentemente ventiladas. El sistema de sujeción es con thumscrews que cumplen su labor a la perfección, de hecho mejor que los que sujetan las tapas laterales.

Este es el aspecto que presenta la Survivor Core por el lateral opuesto. Como vemos hay un generoso espacio para acceder al backplate del procesador.

Encontramos multitud de estas canalizaciones para poder utilizar bridas y así canalizar los cables. Me parece muy acertado.

Como comenté anteriormente, la BitFenix Survivor Core es una caja bastante ancha, y deja mucho espacio para esconder cables por la parte trasera, concretamente 2.3 centímetros. Con este espacio no tendremos problema para esconder todos los cables de la caja, incluyendo los gruesos conectores mólex.

Un aspecto curioso de esta caja es la inclusión del sistema de LEDS. El botón que vimos antes en el panel superior de conectividad que servía para encender y apagar los LEDS de la caja irá conectado aquí, así como el logo frontal, y todos los ventiladores de BitFenix que queramos añadir a la caja y que tengan LED, ya que vienen especialmente preparados para esto. Me parece una característica un poco rara y a su vez complicada, ya que es imposible saber dónde tienes que conectar cada cosa sin ayuda del manual. No hay nada serigrafiado.

Uno de los cables que salen del panel de conectividad superior de la caja es precisamente el que controlará la luz del logo frontal, y que tendremos que conectar al conector que vimos en la foto anterior.

El panel frontal se retira simplemente tirando de él. Cuando lo hacemos, vemos el gran espacio que hay para instalar otro ventilador de 200 mm en la parte de abajo. La gran cantidad de agujeros y su gran tamaño facilitarán la entrada de aire fresco por esta zona.

Como vemos, el adaptador para discos SSD y unidades de 2.5″ sobresale un poco del perfil. Algunos pensaréis ¿qué hace ahí eso si el frontal solo tiene cabida para tres unidades de 5.25″? La respuesta es que esta unidad se puede sacar y colocar en cualquiera de estas bahías de 5.25″, pero BitFenix ha decidido dejarla en la parte inferior por si elegimos instalar discos de 2.5″ en su lugar.

Por la parte trasera del panel frontal vemos las tapas de plástico de las bahías de 5.25″, y debajo un filtro de polvo lavable que podemos retirar quitando cuatro tornillos. Cabe destacar que es necesario retirar el frontal para poder quitar los protectores de las bahías.


En la parte superior de esta, encontramos el logotipo que con el ordenador encendido se iluminará en color rojo.

Dentro de la misma caja, encontramos una caja blanca con los accesorios de la Survivor Core, así como el manual de instrucciones.


Dentro de la caja blanca encontramos los siguientes accesorios:
– Adaptadores para discos SSD de 2.5″:

– Speaker para conectar a la placa base:

– Una bolsita con una generosa colección de tornillos de varios tamaños:

MONTAJE.
En el montaje en la BitFenix Survivor Core, cabe destacar que en la propia base sobre la que reposará la placa tenemos una leyenda que nos indicará dónde tenemos que colocar los tornillos sobre los que luego atornillaremos la placa base.

Una vez identificados solo hay que poner los tornillos correspondientes en los agujeros numerados según el factor de forma de nuestra placa base.

Una vez puestos los tornillos, colocamos la placa base y la atornillamos a los tornillos que colocamos anteriormente. En esta caja es muy recomendable colocar el procesador y el disipador de éste antes de insertar la placa base, dado que si no tendremos problemas para montar luego el disipador si este es de gran tamaño, ya que queda poco espacio entre el disipador y el ventilador superior de la Survivor Core.


Como vemos, aun con un disipador de tipo torre grande, aun queda espacio para cerrar de sobra la tapa lateral.

Como vemos, por detrás queda espacio más que de sobra para acceder al backplate del disipador.

Los discos duros encajan a la perfección en los soportes incluídos con la caja que mostramos anteriormente, tanto discos mecánicos de 3.5″, como SSD (con los correspondientes adaptadores).


Como comentamos anteriormente, las unidades ópticas se fijan mediante tornillos convencionales.


Los LEDs de los ventiladores y del logo frontal van conectados en el sistema que mencionamos anteriormente. Como vemos no queda demasiado ordenado ni claro que digamos.

Sin embargo los cables SATA sí que son fáciles de canalizar gracias a los huecos que BitFenix ha incluído en la Survivor Core.

La tarjeta gráfica se fija de manera muy sencilla y segura con los thumbscrews.

Y como se puede apreciar en la siguiente imagen, queda espacio de sobra para instalar tarjetas gráficas de cualquier tamaño si quitamos el cajetín de discos duros superior.

Y este es el aspecto que presenta la caja con el sistema montado (con y sin la caja superior para discos duros).


Así se ve la caja cerrada y encendida.

He de decir que el montaje del sistema en esta caja ha sido bastante sencillo, excepto por la parte de conexión de los cables de los LED. No me gusta ese sistema que ha incluído BitFenix en la Survivor Core. El sistema de gestión de cables es bastante bueno, y aunque no llega a ser el de por ejemplo una Cooler Master HAF X, sí es muy cómodo al tener tanto espacio por la parte de detrás.
Veamos ahora qué tal se comporta esta caja en cuanto al rendimiento térmico.
TESTEO.
El sistema que se ha utilizado para medir el rendimiento térmico de la BitFenix Survivor Core ha sido el siguiente:
– AMD Phenom II X4 955 BE @ 3820 Mhz (206.5 x 18.5).
– Xigmatek Aegir con dos ventiladores en configuración push-pull.
– Gigabyte 890GPA-UD3H.
– 2x2Gb G.Skill Ripjaws 1600Mhz CL7.
– XFX Radeon HD 6870.
– G.Skill Phoenix Pro 60Gb SSD.
– Seagate Barracuda 7200.12 500Gb.
– Cooler Master Silent Pro Gold 700W.
Además, se han instalado dos ventiladores de 120mm en el frontal Be Quiet! SilentWings USC metiendo aire fresco en la caja. Todos los ventiladores de la caja (exceptuando los del disipador, que se dejaron en PWM) son controlados por un rehobús Scythe Kaze Server, fijando su velocidad a 1.250 rpm, una velocidad bastante alta, pero se ha reducido lo suficiente como para que la caja sea casi completamente insonora.
El equipo ha sido sometido a pruebas de la siguiente manera:
– Idle: Equipo totalmente en reposo durante 20 minutos.
– Load: Procesador sometido a estrés con Prime95 y tarjeta gráfica con Furmark durante 30 minutos.
En cuanto al procesador, se ha configurado de dos maneras diferentes:
– Todos los valores de fábrica (stock): 3.200 Mhz.
– Overclockeado, multiplicador a 18.5 y el bus a 206.5Mhz, resultando 3.820 Mhz. El VCore se ha subido a 1.355V.
La temperatura ha sido medida con las sondas de temperatura del propio Scythe Kaze Server, y se ha tomado como dato la temperatura más alta en cada uno de los casos. La temperatura ambiente ha permanecido estable en 21ºC durante todas las pruebas.
Estos han sido los resultados (la medida que se muestra es únicamente el incremento de la temperatura en lugar de la temperatura alcanzada en sí, de manera que el análisis refleje de manera más fidedigna la influencia de la caja en la temperatura):


El dato que más me llama la atención es el disco duro, cuya temperatura solo aumenta 3ºC con respecto a la temperatura ambiente cuando el equipo está en reposo. Esto denota la eficacia del sistema de introducción de aire de la Survivor Core por la parte delantera, dado que los dos ventiladores que he colocado en esa zona meten aire fresco directamente a la zona del disco duro. En cuanto al procesador, en velocidad de Stock y en Idle, la temperatura no se eleva demasiado, únicamente 9ºC, aunque ya en Load aumenta unos nada despreciables 28ºC (y 35ºC en overclock) que sin llegar a ser demasiado, sí es más que otras muchas cajas. El punto flaco de la Survivor Core en cuanto al rendimiento térmico, bajo mi punto de vista, es la ventilación de la tarjeta gráfica (a pesar de que la HD6870 que tengo tiene disipación externa (external exhaust), lo que quiere decir que expulsa el aire caliente al exterior directamente), dado que no dispone de ventilador lateral que meta aire fresco directamente sobre esta. Esto se ha notado especialmente con el procesador overclockeado, donde la temperatura de la tarjeta gráfica ha aumentado 66ºC por encima de la temperatura ambiente. En cuanto a las temperaturas del Northbridge y de la placa base en sí, han sido totalmente normales, nada especial que destacar en este aspecto.
Hablando de sonoridad, puedo afirmar que es una caja muy, muy silenciosa, siempre y cuando se controlen los ventiladores con un rehobús como hice yo, y se utilicen ventiladores de buena calidad como los SilentWings USC. Con todos los ventiladores a 1250rpm, el ruido de la caja apenas es audible a no ser que pegues la oreja a ésta, y más que ruido, lo que se escucha es el aire pasar a través de las aspas de los ventiladores. Si conectamos los ventiladores directamente a la placa y dejamos que funcionen a máxima velocidad, el sonido que emite la Survivor Core es simplemente un poco rumoroso. Bravo por BitFenix.
CONCLUSIÓN.
La BitFenix Survivor Core es una buena caja, aunque tiene bastantes puntos flojos que a mi parecer, BitFenix debería esforzarse en mejorar en futuras cajas. El más importante de todos es el tedioso sistema de apertura de la caja, que aparte de que necesitas un destornillador para retirar las dos piezas que bloquean las planchas laterales, después cuesta quitarlas dado que entran muy justas por la parte delantera. Repito: tedioso. Después, la no inclusión de un ventilador para que meta aire fresco a la tarjeta gráfica me parece un punto en contra bastante importante, sobretodo teniendo en cuenta las temperaturas que alcanzan las tarjetas gráficas de gama alta del mercado actual. Por último, comentar que hoy en día se agradecen las cajas con sistemas de montaje sin herramientas. En la Survivor Core necesitas destornillador para abrir la caja y montar unidades de 5.25″.
Como puntos positivos, decir que la estética y el tacto de la caja es muy bueno. Es una caja simple pero bonita. El sistema de anclaje de las tarjetas de expansión PCI es muy bueno y fija de manera fácil y segura tarjetas gráficas de gran tamaño y peso. Además tiene un sistema bastante decente de canalización de cables, y la parte trasera es muy amplia, la más amplia que he visto hasta ahora. Por otro lado, incluso con 6 ventiladores instalados (2x120mm en el frontal, 1x120mm en la parte trasera, 2x120mm en el procesador, y 1x200mm en la parte superior, eso sin contar el de la fuente de alimentación y el de la tarjeta gráfica) la caja es muy silenciosa. En cuanto al rendimiento térmico, hay que decir que está por debajo del de otras cajas del mismo rango de precios, pero aun así es muy decente para una caja tan silenciosa.
Vuelvo a comentar que la Survivor Core tiene una hermana mayor, la BitFenix survivor, que incluye dos puertos USB 3.0 y el ventilador frontal de 200mm.
Pros:
– Muy silenciosa.
– Buen sistema de canalización de cables.
– Buen rendimiento térmico.
– Estéticamente bonita y compacta.
– Compatible con gráficas de gran tamaño.
Contras:
– Tedioso sistema de apertura.
– Sistema de gestión de LEDs demasiado complicado.
– Se necesita destornillador para abrirla y para montar unidades ópticas.
– No tiene ventilación lateral.
Por todo ello, desde HardZone le otorgamos a la BitFenix Survivor Core nuestro galardón de plata.


Queremos dar las gracias a BitFenix y a CaseKing.de por habernos enviado la Survivor Core para la realización de este análisis.