5 usos que le puedes dar a tu antiguo PC en lugar de tirarlo
Cuando, a medida que va pasando el tiempo, nuestros componentes se empiezan a quedar cortos de potencia para realizar el trabajo que veníamos realizando con ellos, es el momento de jubilarlos y montarnos un nuevo PC. Pero no por ello debiéramos llevarlo al punto limpio más cercano, dado que hay todavía bastantes más usos que podemos dar a un viejo ordenador para que nos pueda seguir dando dividendos la compra que hicimos en su momento.
Damos por sentado que, si estáis leyendo estas líneas, es porque habéis decidido que ni vais a donar vuestro antiguo sistema a la caridad (que sería algo muy loable por vuestra parte, las cosas como son) o no os lo ha pedido algún familiar cercano (hijo, pareja, padre, madre, etc). Es decir, que vuestra intención es quedaros con todos los componentes. Entonces, tenemos varias ideas que os pueden ayudar a reutilizar vuestro antiguo sistema, y seguir sacándole provecho.
Si ha llegado el momento de jubilar nuestro antiguo PC, no por ello tenemos que, por obligación, deshacernos de todos sus componentes, dado que varios de ellos sí podrían reciclarse para el nuevo PC que tenéis en mente construir. De entre estos componentes que podéis reutilizar en vuestro nuevo equipo, la caja, la fuente de alimentación y las unidades del sistema de almacenamiento pueden volver a tener una nueva vida en el nuevo equipo. Siempre y cuando las especificaciones de estos componentes los hagan compatibles con los modernos, claro.
Sin embargo, si habéis decidido cambiar vuestro antiguo PC por uno completamente nuevo, nuestro consejo es que guardéis los antiguos componentes, por si surgiera un problema con los nuevos y os dejaran tirados. En este caso, el antiguo sistema puede servir como sistema de back up, mientras realizáis el RMA de los componentes defectuosos. De esta manera, no os quedaréis completamente desconectados de Internet.
El antiguo PC puede dar mucho más juego del que imagináis
Otra opción que emplean muchos usuarios, es convertir el antiguo PC en un NAS, donde podréis almacenar los Terabytes de archivos que almacenáis en vuestras unidades de almacenamiento, liberando espacio que podréis emplear para almacenar archivos más recientes. Por ejemplo, toda la colección de fotos que tenéis en vuestro ordenador, que casi nunca soléis mirar, pueden tener un hueco en uno de los discos duros del antiguo sistema. Para este tipo de sistemas se requieren discos duros específicos para NAS. La suerte es que tener un servidor NAS no requiere un procesador muy potente, ni una gran cantidad de RAM ni una potente fuente de alimentación (dependiendo de la cantidad de discos duros que queráis emplear en el NAS, obviamente).
Similar a tener un NAS, pero más orientado hacia el entretenimiento, otra opción es convertir vuestro antiguo PC en un HTPC (Home Theater PC). Algo que es muy sencillo de realizar gracias a lo extendido que están los programas como Kodi o Plex Media Center. Estos programas permiten, al ejecutarse a pantalla completa, dar la sensación de estar dentro de un más que completo reproductor multimedia, donde podréis organizar a vuestro antojo vuestras colecciones de música y vídeo. Y, lo mejor de estos programas, es que, si intentamos reproducir un contenido para el cual el programa carece del codec adecuado, él se encargará de descargarlo e instalarlo en nuestro equipo, sin que nos tengamos que romper la cabeza con este aspecto.
Finalmente, la opción más original de todas sería convertir vuestro antiguo sistema en un acuario. Para ello solo tenéis que conseguir un acuario con paredes transparentes y meter los componentes antiguos en su interior. Quedará un acuario de lo más original. Eso sí, al menos esperamos que no haya nadie que se le ocurra la brillante idea de conectar los componentes a una toma de corriente.