Finalmente has decidido actualizar tu ordenador cambiando el HDD por un SSD, eliminando así el gran cuello de botella que producía el disco duro. Sin embargo, cuando empiezas a utilizarlo detectas que la velocidad de este no alcanza los valores prometidos por el fabricante. Posiblemente esto se deba a un ajuste que tenemos en nuestro UEFI BIOS y es la posibilidad de elegir cómo se comunica la placa con el SSD. ¿Qué es la comunicación AHCI?
Por qué es mejor que utilicemos el modo AHCI
Cuando lo buscamos en la BIOS vemos que podemos elegir entre IDE o AHCI, ambas son formas de comunicarse con las unidades de almacenamiento. El IDE se creó para la comunicación con los dispositivos IDE, o PATA (Parallel ATA), el estándar AHCI (Advanced Host Controller Interface) se utiliza en los dispositivos SATA (Serial ATA).
Este nuevo estándar nos permite poder quitar las unidades de almacenamiento SATA del ordenador sin tener que apagar el ordenador. Otra de las posibilidades que da el AHCI es la posibilidad de atender a varias peticiones a la vez y dar todos los datos de una vez al sistema. Para los HDD que utilizan NCQ el AHCI posibilita que el cabezal acuda más rápido a los sectores dónde se encuentra la información solicitada por el SO.
Aunque el NCQ no afecta a los SSD, algunos usuarios han compartido con la comunidad que sus SSD alcanzan mayores velocidades al estas comunicándose mediante el modo AHCI. Especialmente cuando se trata de la transmisión de archivos pesados.
¿Entonces por qué sigue pudiendo usarse el modo IDE?
Pues porque en antiguos sistemas operativos el modo AHCI no es compatible y aunque lo pongamos en el BIOS, este no funcionará bien.
Tras leer este artículo no debes corres a cambiar el modo de funcionamiento ya que cuando cambiamos de IDE a AHCI el sistema puede dar un pantallazo azul al iniciarse, obligándonos a volver al modo anterior.
Ahora estamos ante el auge del nuevo protocolo NVMe que lanza las velocidades de nuestros dispositivos de almacenamiento a niveles impresionantes. Por lo que, si cuentas con unos ahorros y quieres acelerar aún más tu PC, puedes ir a por un SSD NVMe. Sin embargo, puede que estos discos no sean tan útiles si tenemos en cuenta su calidad/ precio y que a la hora de la verdad no aceleran la velocidad de carga interna de los juegos.