TSMC, en la constante batalla por mantenerse como el productor por excelencia de los procesadores A de Apple, está mejorando sus procesos de producción para permitir la fabricación de procesadores cada vez más pequeños, llegando a los 5nm.
Apple, además de por sus elevados precios, destaca en la gran cantidad de dinero que invierte en i+D, permitiendo el desarrollo de importantes novedades hardware. Muchas veces los resultados no pueden materializarse debido a la falta de recursos físicos que imposibilitan el desarrollo teórico.
TSMC quiere seguir trabajando para Apple
TSMC ha sido el desarrollador en exclusiva de los procesadores de Apple desde el chip A9X usado en el iPad Pro. Tomando el relevo de Samsung y dejándole fuera del partido.
La compañía china esta trabajando en implementar una planta que permita producir en 2020 chips de 5nm, un tamaño realmente pequeño respecto a los 14nm de los procesadores para PC. TSMC planea poner en funcionamiento la nueva planta para procesadores de 5nm en el primer cuatrimestre de 2019, a modo de prueba, para que esté lista para empezar a producir en 2020.
TSMC también trabaja en los 3nm
Sí, como oyes, la cifra cada vez está más cerca del 0. Si ya nos ha asombrado la diferencia de 9nm, no quiero ni pensar como nos dejará la diferencia de 11nm entre los procesadores de uso convencional y los de nuestros smartphones. La compañía planea empezar a trabajar en esa planta en 2020, para tenerla acaba y operativa en el año 2022.
Samsung no se da por vencido
Como es de esperar, Samsung no quiere quedarse atrás en esta competición y asegura que está trabajando en el desarrollo de procesadores de 4nm, intentando adelantar a Apple en la reducción de sus transistores. Es de entender, pues Samsung está viendo como TSMC puede que se quede también con su negocio de la pantallas del iPhone, pudiendo encargarse de fabricar los nuevos paneles microLED.
Lo bueno de este tipo de competiciones es que los usuarios conseguimos aun mejores resultados, ya que cada compañía intenta dar lo mejor de sí en cada lanzamiento. Sin olvidar como infla los precios que una compañía dedique tanto dinero al desarrollo de sus terminales -al final lo pagamos nosotros. Teniendo en cuenta la gran novedad que se añadió a los chips A11, el procesador con red neuronal incluida que nos ayudaba a mejorar el rendimiento del iPhone a medida que los utilizábamos. No podemos dejar de esperar lo mejor de ambas compañías, ya se sabe, la competencia sana nunca es mala.