Nuevamente Silverstone en escena, esta vez para ofrecernos una caja de la serie Kublai. Son las nuevas KL05. Según Silverstone son cajas diseñadas para albergar una refrigeración líquida (si lo han conseguido sería un acierto en cajas de este tamaño) y con un gran número de bahías para poder alojar discos duros sin pensar en la posible limitación de espacio.
Dentro del modelo KL05 opta por dos diferentes «sabores» la KL05-W y la KL05-Q. La KL05-W con panel frontal de rejilla y ventana lateral (la que ha llegado a nuestra web) y la KL05-Q con aperturas de entrada de aire frontal-lateral y con paneles laterales forrados de espuma para minimizar el ruido.
Empecemos con las especificaciones del fabricante:
Como os decíamos al principio es bastante complicado encontrar una caja que aloja tan solo placas con formato ATX pero que a su vez esté preparada para poder instalar una refrigeración líquida custom. Las dimensiones son bastante limitadas y el peso de la caja, al recibirla, es bastante liviano al momento de recibir el paquete del mensajero. Vamos a conocerla más en detalle.
EL EMBALAJE
Sigue Silverstone fiel a su embalaje sencillo, sin estridencias y siguiendo el mismo patrón en todas sus cajas. Características y algún dibujo son las señas de identidad para el embalaje de sus cajas.
Si al principio de nuestro análisis os decía que Silverstone sacaba el modelo Kublai KL05 con dos diferentes cajas, el embalaje sigue sin darnos una pista de cual de las dos es el que nos ha tocado. En la parte frontal un dibujo de ambos modelos y el nombre de la serie Kublai son los principales protagonistas. En la parte inferior alguna de las características más importantes de las cajas y, un detalle curioso y agradable a la vez, Silverstone nos pone un código QR en el cual nos manda, cuando lo escaneamos con el móvil, a la página web del producto en inglés.
En la parte posterior de la caja nos encontramos con un dibujo del interior de la caja en el que nos explican de manera esquemática cada una de las partes con las que nos encontramos. Una vez más nos encontramos con el famoso código QR del que os hablaba anteriormente que nos manda directamente a la web del producto.
En los dos laterales lo que encontramos es el cartón preparado con dos asas para que podamos coger el embalaje con comodidad. Y a parte nos encontramos con las mismas características que nos encontrábamos en el frontal en inglés pero esta vez en nueve idiomas diferentes con su código QR respectivo que nos enlaza a la página web del producto pero traducido a su idioma correspondiente.
En el otro lateral, una descripción y las especificaciones del producto.
En resumen Silverstone, a pesar de la austeridad del embalaje, hace un esfuerzo bastante grande con el fin de que el usuario final pueda tener toda la información necesaria del producto incluso antes de que lo adquiera. Sin duda una excelente iniciativa.
Antes de pasar al análisis externo, abrimos el embalaje y observamos que la caja viene protegida dentro de una bolsa de plástico e inmovilizada dentro de dicho embalaje gracias a dos planchas grandes de poliespan. Además ya podemos conocer cual es el modelo que Silverstone nos ha cedido para nuestro análisis. Es la KL05-W. La ventana viene protegia por ambos lados con un plástico adherente para proteger más aún a la ventana de posibles arañazos.
ACCESORIOS
Los accesorios de la caja se limitan a la tornillería necesaria así como a un breve manual de montaje y desmontaje de las partes de la caja.
ANÁLISIS EXTERNO
Por fin vamos a comenzar con el análisis externo de nuestra caja y como siempre vamos a empezar con el exterior de la misma. Ya la hemos quitado de su embalaje y nos disponemos a conocerla en su esplendor.
Comenzamos con la parte más vistosa de la caja que no es otra que el lateral donde se encuentra la ventana. Muy habitual se empieza a hacer en el mundo de las cajas un chasis de acero y el frontal y la tapa de plástico. En este caso Silverstone no lo es menos. La parte lateral es de acero negro con una ventana de metacrilato. Aunque el tamaño de la ventana no sea especialmente grande, sí nos permite conocer un poco el interior. Poco más que decir del lateral. Dicha tapa lateral está fijada al chasis mediante dos tornillos de cabeza gorda que nos permiten no necesitar de destornillador si no los apretamos mucho con la salvedad de que los tornillos están unidos a la puerta sin la posibilidad de sacarlos del todo. Sin duda una gran idea para aquellos despistados que cuando quitamos los tornillos nunca recordamos donde los dejamos a la hora de volver a cerrar la caja.
Le damos la vuelta a la caja y nos encontramos con el otro lateral también construido en acero pero sin nada destacable. Los tornillos que lo anclan al chasis son también de cabeza gorda, pero esta vez sís que se sacan totalmente. Las líneas rectas y la sencillez en el diseño son las principales características de este lado de la caja.
Vamos a conocer ahora un poco más en detalle el frontal de la caja. El frontal está totalmente construido en plástico aunque da la sensación de estar construido en aluminio por el acabado que Silverstone ha conseguido darle al material. La ventaja de ser plástico es el que ya hemos dicho más de una vez; las huellas no se quedan con tanta facilidad marcadas como en el caso del aluminio. Como os decíamos al principio de nuestro análisis el frontal es de rejilla y tiene cabida para incluir dos ventiladores de 120 mm o de 140 mm.
Justo en el centro de la rejilla Silverstone deja su logo de una manera visible.
La rejilla se puede extraer con mucha sencillez. Tan solo hay que tirar de una pequeña pestaña que hay en la parte inferior del frontal y sale sin complicación. Toda la rejilla está forrada con un filtro antipolvo aunque no se puede quitar.
De hecho en el frontal se alberga el único ventilador que Silverstone pone a nuestra disposición cuando adquirimos la caja. Así es como queda el frontal sin la rejilla y con el único ventilador a la vista. Y si os fijáis, justo debajo podéis encontrar la pestaña de la que os hablaba y que permite quitar la rejilla sin complicaciones.
Justo por encima de la rejilla encontramos las dos bahías de 5,25″ que Silverstone nos deja (hoy en día considero que con dos bahías tenemos más que de sobra pues las unidades ópticas están en desuso) Se me ocurre que el uso que podemos darle a este tipo de bahías puede ser para un rehobús y una unidad óptica.
y justo encima de las dos bahías de 5,25″ tenemos las conexiones externas que la caja nos proporciona. De izquierda a derecha tenemos el botón de reset, un puerto USB 3, las conexiones de audio, otro puerto USB 3, el botón de encendido.
Vamos a conocer un poco más a fondo la parte trasera de la caja. La fuente de alimentación debajo como en la gran mayoría de las cajas actuales, tiene hasta 8 ranuras PCI y justo al lado los dos agujeros para pasar los tubos en caso de que optemos por instalar una refrigeración líquida. Igualmente, la zona que hay a la derecha de las ranuras PCI, a parte de albergar los dos agujeros para los tubos está totalmente agujereada con el fin de lograr una óptima salida del aire caliente de las tarjetas gráficas que tengamos instaladas. En la parte posterior a parte del hueco para poner el I/O Shield o chapita trasera de la placa, tenemos un hueco para un ventilador de 120 mm.
Vamos a conocer las dimensiones reales de la caja con la intención de saber si las especificadas por el fabricante son reales. Nuestras medidas reales son de 195 mm x 523 mm x 490 mm, que coinciden casi al milímetro con las ofrecidas por el fabricante.
Damos un vistazo a la parte superior de la caja. La parte superior de la caja, según vemos en esta vista cenital, está totalmente agujereada para facilitar la salida del aire.
Simplemente quitando dos tornillos podremos levantar la tapa y nos encontramos con un espacio más que suficiente para poder meter un radiador de 240 mm sin el más mínimo problema. Ya empezamos a entender porqué Silverstone dice, que a pesar del tamaño, esta caja ha sido diseñada para albergar equipos refrigerados por agua. Cinco centímetros tenemos para poder alojar un radiador y poder poner la tapa posteriormente.
Y por supuesto aquí os dejamos un detalle de la tapa.
Pasamos a conocer más a fondo la parte inferior de la caja. La parte inferior está forrada con un filtro antipolvo que nos permitirá la entrada de aire limpio desde el exterior de la caja. Además dicho filtro es muy sencillo de eliminar y limpiar llegado el caso (al contrario de lo que pasaba con el del frontal). Igualmente, y si os fijáis en la foto de más abajo, el suelo está preparado para poner dos ventiladores de 120 mm metiendo aire del exterior si fuera necesario.
Una de las cosas que menos me han gustado de la caja es que las patas sobre las que se apoya no están hechas de goma, con lo que se podría ganar en adherencia e incluso estabilidad.
EL INTERIOR DE LA CAJA
La primera sensación que nos queda una vez entramos en el interior de la caja es el espacio más que suficiente para trabajar cómodamente dentro de ella. La chapa que Silverstone ha utilizado para el chasis no es especialmente gruesa pero bien es cierto que a pesar de ello y que tiene bastantes huecos la sensación de rigidez y robustez es bastante grande.
Vámonos a la parte inferior de la caja y nos encontramos a la derecha las dos jaulas para poder albergar hasta 6 discos duros de 3,5 pulgadas. Estas jaulas son una importante limitación a la hora de poder instalar tarjetas gráficas de gran longitud pues con las dos jaulas colocadas solo tendríamos acceso a instalar una GPU de 406 mm sacrificando así un posible SLI o CF de tarjetas de gran tamaño. Solo si quitamos la jaula de la parte superior podríamos optar a esa solución. La ventaja es que son extraíbles y esto facilita el poder instalar dos o más tarjetas de mayor tamaño y poder incorporar un radiador de hasta 360 en la parte frontal de la caja.
Las bandejas para la instalación de los discos se sacan con gran facilidad. Tan solo atornillar el disco en dicha bandeja y empujarla dentro de la jaula. Por supuesto las bandejas tienen los agujeros o bien para fijar discos de 3,5 pulgadas o bien de 2,5 pulgadas.
La jaula para las dos bahías de 5,25 pulgadas desgraciadamente no es extraíble, de ser así podríamos instalar un radiador de hasta 480 mm en el frontal de la caja. En cualquier caso tampoco parece una limitación demasiado importante y la instalación de unidades de 5,25 es bastante sencilla gracias al mecanismo para fijarlas (sin tornillos) que ya es bastante utilizado por los fabricantes de cajas pero que no deja de ser bastante útil.
La parte superior, como ya os habíamos comentado, presenta la posibilidad de incluir un radiador de hasta 240 mm y 5 centímetros de altura, una altura más que suficiente por mucho espesor que tenga dicho radiador. Es más la caja está diseñada para instalar un radiador de 280 mm.
En la parte trasera de la caja tenemos el hueco para un ventilador de 120 mm que si os fijáis tiene los taladros hechos para poder mover el ventilador unos milímetros arriba o abajo para facilitar su montaje. Una idea extraordinaria.
Vamos a la parte posterior de la caja y vamos como gestiona Silverstone el cableado. Pero antes de hablar de la gestión del cableado ya nos encontramos con un gran hueco que se abre en la bandeja de la placa base. Gracias a este generoso hueco podremos instalar/desinstalar disipadores con backplate sin necesidad de quitar la placa. El hueco mide 16 cm de ancho por 14 de cm alto por lo que es más que espacioso para poder trabajar con el backplate de la placa.
En cuanto a la gestión del cableado me deja un sabor agridulce. Si bien es cierto que la bandeja presenta un gran número de huecos para poder pasar la mayor parte de los cables a la parte posterior de la caja si es cierto que podría haber puesto arandelas de goma alrededor como hacen otros fabricantes para evitar la posibilidad de que el cable se corte o bien dejar tapados los huecos. No es algo que hubiera costado mucho y a parte de que queda estéticamente mejor evitas accidente con cables que puedan quedar tirantes.
Pero esto no es lo que más me ha disgustado entre comillas. La distancia de apenas dos centimetros que queda entre la bandeja de la placa y la tapa lateral no da mucho margen para colocar el cableado. Siempre hubiéramos preferido ese centímetro de más que nos debería dejar colocar el cable de forma holgada sin tener que hacer esfuerzos para poner la tapa lateral.
En cuanto al cableado que nos presenta Silverstone tenemos el que nos da opción de tener dos puertos USB 3.0 en el frontal de la caja así como tranzados en diferentes colores los de reset, power, y LEDs y por supuesto HD Audio.
Finalmente, y antes de pasar al montaje, haremos alusión a las dos pequeñas bandejas que Silverstone pone a nuestra disposición en la parte posterior de la caja para poder alojar dos discos de 2,5 pulgadas. Sin duda una nueva posibilidad para no tener que usar las dos jaulas de discos de 3,5 pulgadas si no vamos a buscar almacenamiento masivo en nuestro PC. estas dos pequeñas bandejas tienen más importancia de lo que parece pues si nos conformamos con un SSD para el SO y un disco mecánico de mayor tamaño de 2,5 pulgadas para programas y demás, podemos quitar las dos jaulas de 3,5 pulgadas de la parte interior de la caja y dejar hueco o bien para más de una GPU de gran tamaño o bien para un radiador de hasta 360 mm en la parte frontal de la caja.
EL MONTAJE
El montaje es extremadamente sencillo. El espacio que la caja nos permite para maniobrar en su interior es bastante «agradecido» y las posibilidades de extraer las jaulas de los discos duros convierte el montaje en más sencillo si cabe.
A lo largo de esta review os hemos hablado de las diferentes medidas de componentes que caben en esta caja, y son grandes, pero sin duda lo importante también es la sencillez en el montaje y la sensación de encontrar una caja limpia y sin apenas cables de por medio.
Lo primero que hemos hecho es instalar la fuente de alimentación y hemos quitado las jaulas de discos de la izquierda para ver el gran hueco que hemos dejado despues incluso de instalar una fuente de una gran longitud. La fuente que hemos usado para el análisis tiene unas medidas de 200 mm de longitud. Si os fijáis, la fuente no se convierte en inconveniente a la hora de elegir si mantenemos las jaulas de discos.
La gran ventaja de desmontar dicha jaula es la gran ventaja que podríamos tener para instalar sin problemas un radiador de 240 mm en el frontal de la caja, aunque como ya veremos más adelante, la parte superior es el lugar idóneo. En la foto de abajo os podéis fijar en el enorme hueco que hemos dejado libre tras quitar las jaulas. Un radiador de 240 mm cabe con absoluta comodidad. La pena es que la caja para las dos bahías de 5,25″ no pueda quitarse. De esta forma podríamos poner un radiador de hasta 3360 mm.
Pero aunque os hemos hablado de la ventaja del frontal, el verdadero espacio y hábitat natural para el radiador de está impresionante caja concebida para una RL es sin duda la parte superior. Si os fijáis en la foto de abajo, en la parte superior de la caja podemos poner o bien el radiador o bien los ventiladores y después cerrar la tapa. Sin duda el gran hueco de 5 cm que deja Silverstone en su Kublai tiene muchas posibilidades. De esta forma podemos optar por utilizar una configuración push/pull de ventiladores sin el más mínimo estorbo. Si solo utilizas dos ventiladores empujando os aconsejamos los pongáis en la siguiente disposición (cogiendo el aire frío del exterior para enfriar el radiador de la forma más óptima posible).
En cuanto a la longitud de las tarjetas gráficas ya os decía que cualquier tarjeta del mercado actual tiene cabida en esta caja en cuanto a longitud se refiere. Todo ello gracias al sacrificio que hace de las bahías de 5,25″, aunque está opción me parece más que acertada y adaptada al día de hoy. Cada vez es mayor el tamaño de las GPUs y de las configuraciones MultiGPU y por otro lado las unidades ópticas y demás dispositivos de 5,25″ están en desuso.
Si quisiéramos optar por configuraciones MultiGPU, recordad que tendríamos que sacrificar las jaulas de los disco (o al menos una de ellas). Si os fijáis en la foto de más abajo hemos optado por una Gigabyte GTX970 G1 Gaming y fijaros aún el espacio que queda para poder instalar gráficas de mayor tamaño. Para que os hagáis una idea, la tarjeta gráfica que hemos usado tiene una longitud de unos 315 mm.
Vámonos a la parte posterior y podemos comprender el gran hueco que Silverstone ha abierto en su Kublai en la bandeja de la placa base, gracias al cual podremos cambiar de backplate del disipador de la CPU sin necesidad de desmontar la placa base. Sea cual sea la disposición del socket de la placa vamos a encontrar hueco para poder extraer el backplate.
Otra de las funcionalidades de las que os hablábamos más arriba es la posibilidad de anclar dos discos de 2,5″ en la parte posterior de la bandeja.
CONCLUSIÓN
Muy agradable sabor de boca me ha dejado la caja que hemos analizado en esta ocasión. Cuando me dijeron que era una caja para placas con formato ATX pensé…»una más». Pero no. Conseguir en una caja de tamaño medio un excelente escenario para montar una buena RL sin limites de espacio creo que es algo que venía buscando un gran número de usuarios y creo que Silverstone la ha encontrado.
El único pero es el poco espacio que deja en la parte posterior para la gestión del cableado, y aun así, hemos tenido el suficiente para montar un PC normal. La idea de eliminar las bahías de 5,25 era algo que veníamos demandando los usuarios y por fin un fabricante nos ha escuchado…y ha sido Silverstone.
Sin duda estáis ante una caja de un gran rendimiento para un tamaño bastante reducido en comparación con las cajas que hoy en día hay a nuestro alcance y que ofrecen lo mismo que esta. ¿el precio? esta caja os ofrece gran cantidad de funcionalidades que ofrecen otras de un precio mucho más elevado. 80€ se me antoja un precio justo para una caja que ofrece algo nuevo en el ya más que explorado mundo de las cajas.
VENTAJAS
- Gran espacio interior
- Posibilidad de GPUs de gran longitud (hasta 400 mm) y configuraciones MultiGPU eliminando las jaulas de discos
- Nos permite optar por una gran posibilidad de medios de almacenamiento si mantenemos las jaulas de discos
- Permite la instalación de disipadores de hasta 165 mm de altura
- Permite la instalación de fuentes de cualquier tamaño
- Una caja pensada para una RL custom a pesar del tamaño
INCONVENIENTES
- Solo incluye un ventilador para el precio que cuesta
- La gestión de cables es algo limitada
- Solo compatible con placas hasta ATX estándar