No hace mucho que el fabricante MSI desveló sus nuevos sistemas Vortex, equipos de gama muy alta integrados en una carcasa cilíndrica de reducidas dimensiones, al estilo Mac Pro de Apple. En el día de hoy os vamos a mostrar nuestro particular análisis de una de éstas unidades, concretamente del MSI Vortex G65 6QF SLI que incorpora entre otras muchas cosas, un procesador Intel Core i7-6700K y dos GeForce GTX 980 en SLI.
El MSI Vortex es un equipo para los Gamers más exigentes que por un lado no quieren complicarse la vida con ordenadores por piezas y, por otro, quieren lo mejor de lo mejor sin importar el precio. Y es que los MSI Vortex vienen en diferentes configuraciones de hardware pero en todos los casos parten de un precio de 2.000 euros y, el modelo de más alta gama, alcanza los 4.500 euros. El modelo que nosotros vamos a analizar en el día de hoy es casi el tope de gama: su precio es de 4.000 euros.
En cuanto al diseño, al igual que el Mac Pro de Apple el MSI Vortex tiene una caja cilíndrica con tres paneles en los que se instalan los componentes. En el centro tiene un ventilador tipo blower (turbina) que refrigera de manera simultánea todos los componentes del sistema, un método de refrigeración que Apple ya demostró con sus Mac Pro que es tremendamente efectivo. Además, incluye la tan de moda iluminación RGB personalizable por el usuario, lo que aunado a su extrema potencia y a su pequeño tamaño y peso lo hacen ideal para llevárnoslo a las LAN Parties.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS.
El Vortex que vamos a analizar hoy tiene instalado un procesador Intel Core i7-6700K, 32 GB de memoria RAM DDR4 funcionando a 2133 Mhz y dos GeForce GTX 980 de sobremesa, con 8 GB de memoria dedicada cada una de ellas (16 GB en total). Asímismo, cuenta con dos SSDs NVMe PCI-Express de 128 GB cada uno configurados en modo SuperRAID 4 (RAID0), entregándonos un rendimiento teórico de hasta 3,2 GB/s de lectura y 1,6 GB/s de escritura, por lo que los juegos instalados en el SSD literalmente «volarán». También tiene un disco mecánico de 1 Tb de capacidad y la fuente de alimentación de 450 vatios 80Plus Gold va integrada.
En el apartado de la conectividad, incorpora una tarjeta de red Killer E2400 Gigabit con Killer Shield y dos tomas RJ-45 con capacidad de hacer Teaming, además de una tarjeta inalámbrica Killer Wireless-AC 1535 con soporte MU-MIMO para un mayor alcance inalámbrico. Además tiene, claro Bluetooth 4.1 y una conectividad que abarca desde puertos USB 3.0 (cuatro con conector Type-A) hasta los nuevos USB 3.1 (dos con conector Type-C). También tiene dos salidas de vídeo HDMI y dos Thunderbolt 3.
Todo éste potente hardware se integra en una caja de forma cilíndrica que mide 191.7 x 278 x 202.5 mm y pesa 4 Kg, por lo que como decíamos antes es muy sencillo de transportar y de poner encima de la mesa sin que abulte demasiado. Tiene también iluminación RGB configurable y, eso sí, hay que tener en cuenta que con el diseño de refrigeración tipo turbina podremos ponerle cosas alrededor pero nunca nada que tape la salida de aire superior.
ANÁLISIS EXTERNO.
El MSI Vortex G65 viene embalado en una caja de color negro en cuyas caras podemos ver el dispositivo por la parte de delante. En uno de los laterales tenemos resumidas algunas de sus características, incluyendo el SuperRAID 4, el audio Nahimic, puertos Thunderbolt, la refrigeración «Storm», las tarjetas de red Killer y la fuente de alimentación 80Plus Gold.
Poca cosa nos encontramos entre los accesorios dado que en éste caso el Vortex es un sistema completo con todo integrado. Manual de instrucciones, información sobre la garantía, cable de corriente, CD de drivers (algo curioso pues no tiene lector de CD/DVD) y poco más.
Aquí podéis ver el MSI Vortex por su parte delantera. Tiene un frontal en el que solo está el logo de MSI en la zona inferior y el botón de encendido en la superior, y dos paneles laterales que podríamos retirar para acceder a los componentes internos.
En la zona superior tenemos tres rejillas con forma de panal de abeja que son la salida de aire del sistema (repetimos que es imprescindible el jamás tapar ésta salida de aire), además de una barra en ángulo que se iluminará cuando el equipo esté encendido.
En la zona trasera encontramos otra rejilla para salida de aire con el logo del dragón de MSI, y todos los puertos de conexión del equipo, de nuevo al estilo Mac Pro de Apple.
Aquí podéis ver más de cerca ésta rejilla con el logo que, por cierto, también se ilumina.
Aquí el panel de conexión principal. Cuenta con una salida de audio digital S/PDIF y dos minijacks para micrófono y auriculares, cuatro USB 3.0 con conector Type-A, dos HDMI y los dos puertos RJ-45 Gigabit.
Un poco más abajo, prácticamente en la base, tenemos los dos USB 3.1 con conector reversible Type-C y los dos puertos Thunderbolt que también son compatibles con salida de vídeo mini DisplayPort.
En la base nos encontramos con tres grandes patas de goma que elevan el dispositivo unos centímetros para dejar que el aire entre por la rejilla. Ésta zona inferior tampoco debe ser tapada jamás pues es la entrada de aire principal del sistema (recordad que el aire entra por debajo y sale por arriba, refrigerando en su paso las tres placas principales de componentes).
Aquí en la base, en la zona central, tenemos el conector para el cable de alimentación. He de decir que es incómodo de utilizar pues para poder conectarle el cable de corriente hay que levantar el Vortex completamente, y al menor tirón el cable se suelta.
MSI nos ha pedido expresamente que no realicemos análisis interno del producto, lo cual es una lástima pues éste producto nos parece una maravilla de la técnica moderna. No obstante, respetamos la petición del fabricante y por lo tanto nos os podemos mostrar el análisis interno del mismo.
TESTEO.
Hora de enchufar el MSI Vortex G65 y comenzar a utilizarlo.
El software.
El MSI Vortex viene con Windows 10 ya instalado de fábrica, así que no tendremos que preocuparnos de andar instalando drivers y demás porque todo viene listo para utilizar (sí que actualizamos los drivers gráficos a la última versión, claro). Tiene instaladas bastantes herramientas (entre ellas el Norton Security que también desinstalamos antes de realizar ninguna prueba pues ralentiza todo el sistema) incluyendo el MSI Dragon Center, que nos permite controlar y monitorizar gran parte de los parámetros del sistema.
Os vamos a enseñar las partes que nos han parecido más interesantes. Aquí, por ejemplo, podemos monitorizar todos los parámetros del sistema incluyendo temperaturas, uso de CPU, GPU, discos y red, así como ver el consumo.
También podemos configurar la iluminación exterior del aparato, configurable en cinco zonas diferentes y pudiendo escoger, de manera independiente, el color RGB que queramos, así como los diferentes efectos que podéis ver en la siguiente imagen.
En la pestaña «Sintonizador del sistema» podremos aplicarle diferentes configuraciones de rendimiento y de ventilador al sistema.
Éste dispositivo también tiene una aplicación móvil para sistemas iOS y Android que nos permite controlar y monitorizar ciertos parámetros del sistema. Para utilizarlo hace falta que ambos dispositivos estén en la misma LAN (no la misma dirección IP como dice, es una mala traducción).
Consumo y temperatura
Tanto el consumo como la temperatura lo hemos medido utilizando el propio software MSI Dragon Center. El resultado ha sido el siguiente (dato de temperatura con 25ºC estables en la estancia).
También he de decir que en reposo, el MSI Vortex es muy silencioso, prácticamente inaudible. Sometido a carga sí que hace ruido, pues el ventilador funciona a bastante velocidad, pero el ruido no lo emite la turbina en sí sino el aire que sale por la parte superior. A decir verdad no es nada molesto.
Pruebas sintéticas.
Comenzamos, cómo no, con las habituales capturas de CPU-Z y GPU-Z.
Varias cosas a reseñar en la captura de GPU-Z. Para empezar, no le hagáis caso a la versión de los controladores pues es la que venía instalada y posteriormente instalamos la última disponible (368.81 WHQL). También mencionar el hecho de que el sistema cuenta con tecnología NVIDIA Optimus, por lo que cuando estemos en el escritorio utilizará la gráfica integrada Intel HD 530 para ahorrar energía y generar menos calor. También mencionar el hecho de que según nos muestra GPU-Z, las dos gráficas GeForce GTX 980 en SLI utilizan un zócalo PCI-Express 2.0 x8 y no un PCI-Express 3.0. Costando lo que cuesta el equipo, MSI ya podría haber utilizado una placa de última generación para asegurar el máximo rendimiento, la verdad.
Aquí podéis ver ya los controladores nuevos instalados.
Vamos ahora sí con las pruebas.
CrystalDisk Mark.
SSDs (SuperRAID 4).
Disco mecánico.
Mientras que el rendimiento del disco mecánico es el habitual en su formato, el rendimiento de los dos SSDs NVMe PCI-e en SuperRAID 4 (RAID0) es asombroso, casi alcanzando los 3.1 GB/s de velocidad de lectura.
Aida64 memory benchmark.
El rendimiento de la memoria RAM, la verdad es que deja un poco que desear pues es justo lo habitual en módulos DDR4-2133 Mhz en modo dual channel. Tratándose del equipo que se trata nos extraña un poco que MSI no haya optado por RAM más rápida, pues seguro que bien podría soportar RAM a 3200 Mhz o más que nos entregaría un rendimiento muy superior.
Cinebench 11.5
Cinebench R15
El rendimiento del procesador en Cinebench (ambas versiones) es simplemente impresionante, entregando un rendimiento de renderizado muy pero que muy elevado. En cuanto al rendimiento OpenGL tened en cuenta que Cinebench no es capaz de utilizar ambas gráficas en SLI y muestra por ello el rendimiento de una sola GTX 980.
Aida64 GPGPU Benchmark
La capacidad de cómputo del sistema se ve reflejada en éste benchmark. Es capaz de gestionar hasta 9,2 TFLOPs por GPU como si nada.
PCMark 8
Pruebas de rendimiento gráfico
3DMark
Éste ha sido el resultado obtenido en las tres vertientes de 3DMark Fire Strike.
Y éste en la nueva prueba Time Spy, específica para DirectX 12.
El rendimiento que entrega ese SLI de dos GTX 980 es impresionante en 3DMark.
Heaven Benchmark.
Como podéis ver el MSI Vortex se desenvuelve de manera holgada en el aspecto gráfico, algo que vais a ver reflejado a continuación con las pruebas en juegos que os vamos a mostrar.
Pruebas en juegos.
Ahora sí, vamos a lo que de verdad interesa que son los juegos. Hemos empleado algunos de los títulos más jugados del panorama actual, y lo hemos hecho tanto en resolución Full HD como en Ultra HD, pues MSI vende el Vortex como preparado para jugar a resolución 4K sin problemas.
En la siguiente gráfica podéis ver el rendimiento en FPS medios medidos con la utilidad de Benchmarking de FRAPS en algunos títulos actuales, en todos los casos con todos los ajustes gráficos al máximo. Haced clic en las gráficas para verlas más grandes.
CONCLUSIÓN.
Pues sí. Efectivamente el MSI Vortex G65 es un equipo compacto y bastante silencioso que nos permitirá jugar a tope a todos los últimos juegos del panorama actual sin tener que preocuparnos mas que por destruir a nuestros enemigos. Con un rendimiento propio de un PC de sobremesa de alta gama, el Vortex nos da todo lo de un PC de gama alta con el tamaño de una consola y con un nivel de personalización enorme.
Es muy, muy caro eso sí (recordad que el modelo analizado cuesta 4.000 euros en tiendas) pero para aquellos usuarios a los que les da igual el precio mientras tengan lo mejor, el MSI Vortex les solucionará la vida de manera sobresaliente.
PROS:
- Rendimiento excepcional.
- Estéticamente me parece precioso.
- Altamente configurable.
- Ocupa muy poco espacio.
- No hace demasiado ruido.
CONTRAS:
- Poca o nula capacidad de ampliación.
- Rendimiento de RAM mejorable.
- Muy caro (4.000 euros el modelo analizado).
Por todo ello, el MSI Vortex G65 se lleva nuestro galardón de Platino a pesar de su mala nota en el precio, y se lleva nuestros galardones tanto por su excelente rendimiento como por su diseño, que nos parece impresionante.