Tal y como os adelantábamos en Septiembre (cuando todavía pensábamos que el nuevo sistema operativo de Microsoft se llamaría Windows 9), ahora se ha confirmado que Microsoft permitirá actualizar de manera gratuita a Windows 10 a los usuarios que posean una licencia original de Windows 8.1 y Windows 7, aunque eso sí, en principio solo durante el primer año de vida del sistema operativo (es decir, que pasado un año desde su lanzamiento, los usuarios de Windows 8.1 y Windows 7 tendrán que pagar para actualizar).
Este movimiento de Microsoft puede ser fundamental para cómo pretende la empresa monetizar el que será su nuevo sistema operativo buque insignia, que por cierto recordemos que todavía no hay fecha estimada de lanzamiento. En cualquier caso se trata de una gran noticia para todos los poseedores de una licencia legal de Windows 8.1 y Windows 7, ya que Windows 10 se ha postulado desde el comienzo como un sistema operativo robusto, funcional y a la vez ligero, que permitirá una sencilla interacción entre todos los productos de Microsoft (¡y además volverá el menú inicio!).
Otro de los motivos fundamentales por la que muchos usuarios querrán actualizar a Windows 10 es que la próxima API gráfica de Microsoft, DirectX 12, que como ya sabéis incluirá comandos de bajo nivel, será exclusiva de este sistema operativo y no será compatible ni tan siquiera con Windows 8.1.